JosuHan Week 2023

Day 3: High School.

Higashikata Josuke no era exactamente un estudiante modelo, pero se esforzaba para mantenerse al menos como un estudiante promedio y de buen comportamiento. Tenía que hacerlo si no quería tener problemas con su madre.

Siendo un joven de naturaleza tranquila, no era difícil para él acatar las reglas, acostumbrada ser respetuoso con los profesores y con las figuras de autoridad, inclusive con los estudiantes de grados superiores. Sabía que no era el mejor en cuanto a lo académico, así que al menos quería mantener un historial limpio como un chico obediente de todas las reglas. La puntualidad era uno de los aspectos en los que más esfuerzo ponía, asegurándose de llegar al instituto al menos 15 minutos antes del comienzo de las clases. Con la finalidad de ayudarle, su madre le había obsequiado una bicicleta recientemente, para que así su camino a la escuela fuese más fácil y rápido.

El gesto de su madre fue apreciado por el chico y de no ser porque no era muy bueno conduciendo en bicicleta, el obsequio habría sido perfecto. Previendo que algo podría salir mal en sus viajes a la escuela, Josuke pasó todo su fin de semana practicando y pese a que logró pulir sus habilidades aún le era difícil frenar y eso quedó en evidencia cuando de camino a la escuela casi atropella a alguien.

Higashikata no tuvo tiempo de frenar cuando al pasar por una esquina, alguien más apareció desde el otro lado.

— ¡Ahhh! — El chico apenas y tuvo tiempo de reaccionar. Al no tener mucha práctica con el freno no pudo hacerlo para evitar un accidente, pero se las arregló para que este no fuese grave.

La otra persona terminó en el suelo, pero no fue arrollada.

Josuke casi termina en el suelo con la bicicleta, pero su centro de equilibrio le ayudó a mantenerse en pie, sin embargo dejó la bicicleta en el suelo para ir a socorrer a la persona en el suelo.

— ¡Lo siento! ¡No pude frenar a tiempo! ¡¿Está herido?! — Se apresuró a preguntar extremadamente preocupado y avergonzado. Su cabeza no dejaba de pensar con culpa y temor hasta que vio de quién se trataba. — Ah —.

Reconocería ese cabello verde y esos aretes donde fuera. Por desgracia.

— "Ah"... ¡¿Qué clase de reacción es esa?! — Cuestionó el chico en el suelo. Su maletín y su bloc de dibujo terminaron en el suelo junto con él.

— Solo eres tú, estaba preocupado, pensé que era alguien más — El semblante de angustia y preocupación de Higashikata cambió una vez que su cerebro procesó la identidad del desconocido.

— ¿Qué quieres decir con eso? Más importante aún ¡¿Qué demonios haces conduciendo como un demente?! — Exclamó Kishibe Rohan sumamente molesto por el incidente y al ver todas sus cosas en el suelo.

— Hey, no lo hago tan mal, solo no soy bueno frenando — Dijo quitándole importancia.

Aquella actitud tan despreocupada hizo enojar más al chico de cabellos verdes, quien deseaba más que otra cosa gritarle y reclamarle por su imprudencia al conducir, pero estaba más ocupado con el malestar en su tobillo derecho.

— Desaparece de mi vista, Higashikata — Ordenó mientras intentaba levantarse, pero le fue imposible al sentir demasiado dolor en su tobillo. Su intento por ponerse de pie le regreso de nuevo al suelo haciendo una mueca de dolor.

Josuke, quien pretendía tomar su bicicleta e irse lo más rápido posible, desechó sus planes al verle y la culpa volvió a fluir en su interior.

— Oye... ¿Estás bien? —.

— Como si te importara — Masculló Rohan logrando arrodillarse para recoger sus cosas. — Solo desaparece —.

Y aunque Josuke pensó en hacerlo, algo se lo impidió. Si bien procuraba ser respetuoso con todos los senpai, nunca pudo serlo con Kishibe Rohan. El arrogante Kishibe Rohan y él nunca se habían llevado bien, incluso siendo de grados distintos habían terminado conviviendo por diferentes razones, pero eso solo sirvió para que las personalidades contrarias de ambos chocaran y se declararan odio mutuo. Solían ignorarse lo más posible y cuando les era imposible y se veían forzados a convivir discutían todo el tiempo.