Epílogo

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Rumi terminó de meter la última maleta a la camioneta y cerró la cajuela de un golpe, limpiando el sudor de su frente con una gran sonrisa en el rostro

- voy a extrañarte - dijo Keigo parado a su lado

- no empieces con sentimentalismos ahora, sabes que no me gustan las despedidas con lágrimas y mocos de por medio, solo te vas mudar de distrito,  no del país...¿a donde me dijiste? -

- Shirakawa Go -

- ¿Shirakawa Go? ¿Y que hay en Shirakawa como para que se vayan hasta allá?  Hasta donde sé solo hay montañas -

- exacto, solo montañas, cielo despejado y aire limpio, no por nada dicen que son los alpes suizos japoneses-

- suena aburrido, tu sugar daddy te está pegando costumbres de viejo -

- en primera, no es mi sugar Daddy, es mi novio, en segunda, fui yo quien sugirió Shirakawa, los halcones no viven en las ciudades ¿sabias? Son criaturas de la naturaleza -

- pues mi espíritu animal es un conejo y no me ves buscando madrigueras -

- pero si saltando de aquí para allá y repartiendo "amorcito" por todos lados -

Mirko soltó una carcajada y dio un manotazo a la espalda de Keigo que se quejo de inmediato por el dolor

- ¡hey! -

- lo siento, solo...creo que también te echaré mucho de menos -

- lo sabía,  entonces ¿nos damos un último abrazo? Como despedida -

- uno y ya, no me vayas a pegar tus piojos -

Ambos se dieron un fuerte y afectivo abrazo, Keigo no tenía hermanos, pero si hubiese tenido una hermana, a puesto que la querría de la misma forma que a Rumi

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Rei abrió la puerta de su nueva casa permitiéndole  a sus hijos entrar, era apenas un poco más pequeña que su antigua residencia, pero lo suficientemente grande y cómoda para que ella y sus hijos vivieran ahí sin ninguna preocupación

- wow, es muy bonita ¿ya viste el jardín mamá? - pregunto Fuyumi abriendo una puerta corrediza que daba a su nuevo jardín

- si, me gusto mucho, creo que podre aplicar aqui todo lo que sé de jardineria -

Shoto entro detrás de ellas con una pecera en las manos, ahí se encontraban los únicos dos peces sobrevivientes del estanque de su antigua casa, Shoto los había sacado con la idea de reubicarlos en un buen lugar

- ¿donde esta Natsuo? - pregunto Rei

- afuera - respondió Shoto dejándola pecera en la mesa - creo que esta hablando con su novia -

- entonces ¿regresaron? -

- es lo más probable - respondió Fuyumi con una sonrisa pícara - ella fue a verlo casi a diario al hospital y ayer se quedaron hasta después de media noche platicando por teléfono...yo creo que veremos a Nezumi chan de vuelta muy pronto por aquí -

- me alegra, Nezumi chan es una buena chica -

Rei camino por la casa viendo lo que sería su nuevo hogar, al entrar a su nueva recamara vio en su tocador un florero con una solitaria flor azul, su favorita, bajo este se encontraba una carpeta con una nota y una acta de divorcio donde solo faltaba su firma

【 Rei, lamento tanto todo el daño que te hice a ti y a nuestros hijos, espero que en esta casa puedan crear solo momentos de felicidad, se que eso no borrara los malos del pasado, pero tengo fé en que  la paz y dicha colmará en su vida futura.

Vida PropiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora