Opinión invalida

242 29 0
                                    

Unos cuantos meses soportando algunos golpes y humillaciones de Jungkook, nada era lo mismo.
Sin embargo, Taehyung estaba determinado a salvar su matrimonio, analizó cada detalle que a su esposo le molestaba para poder modificarlo.

En las tardes solía limpiar su hogar mientras Jungkook trabajaba, el único problema que tenía es que el alfa viajaba mucho.
El omega al estar marcado, sufría bastante la distancia y constantemente le pedía al alfa que no se separara de el.

Un día común y corriente se encontraba leyendo cuando escucho el timbre de la entrada sonar, salió a ver quién era y extrañamente era su esposo con otros 4 hombres.

Abrió de inmediato y saludo cariñosamente a Jeon, los hombres sin mediar palabra entraron al hogar.

—¡Hey! ¿Qué hacen?— Tae estaba confundido ya que los tipos empezaron a sacar cosas de la casa.

—¿Qué no ves? Hoy nos mudamos a Seúl, hace unos días vendí la casa y compré otra allá— el omega no podía asimilar lo que su alfa le decía.

—Pero Jungkook, ¡este es el hogar donde me crié! Aquí es donde vivió toda mi familia, además nunca me consultaste nada para vender mi casa o mudarnos— el más alto agarró del cuello al omega y apretó con fuerza.

—¡Me importa una mierda si aquí viviste o vivió tu mugrosa familia! Y te recuerdo cariño, que está es NUESTRA casa— los hombres seguían sacando las cosas mientras le miraban con pena.
Pronto empezó a llorar y quiso safarse del agarre, recibiendo una cachetada del alfa nada más tocar su brazo.
Con el otro brazo, Jungkook jalo del pelo al castaño para mirarlo fijamente.
—si te quieres quedar a mí no me importa, yo me voy ya y no pienso esperar a que se pase tu berrinche— sonrió sinicamente —yo como tu esposo quiero lo mejor para los dos, pero si no me quieres acompañar— aflojó su apretón para recibir en sus brazos al omega.

—¡No cariño! La casa no me interesa yo me iré contigo— los demás hombres miraron con recelo al alfa.
—¡Yo te amo! No me dejes solo aquí porfavor— el omega se puso de puntitas y beso los labios del alfa.

—vamos entonces, cariño— tomó la mano del castaño y salieron del hogar.

—Cuando terminen lleven todo a la dirección que les dije— subieron al coche dejando solo el camión de mudanza y a los cuatro hombres lamentándose por el omega.

Sin pensarlo un segundo, saco su celular y marcó a su hermano Namjoon para explicarle que se mudaria de imprevisto.
Dado que no le contesto, marcó a su cuñado Jin y este si descolgó.
—Hola Taehyunie~— no sabía cómo empezar a explicar.

—Hola Jin, ¿No está por ahí mi hermano? Esque no contesta— Jungkook se tensó en el asiento del conductor al escuchar el nombre de Jin.

—ou, estamos en un restaurante cenando, pero te lo paso— seguido escucho la voz de su hermano.

—dime Taehyung— se le oía apurado en terminar la llamada, y entonces fue al punto.

—esque... Hoy a Jungkook le dieron un trabajo en Seúl permanentemente y nos estamos mudando de imprevisto— Miró a su alfa buscando su aprobación recibiendo una sonrisa.

—¿Porque no me dijiste antes? Tae estoy en una cena, espérame tantito y ahorita llegó a dónde quiera que estes- Jungkook le hizo una seña para que se muteara y lo hizo.

—No tenemos tiempo para esperarlo, solo dile que el próximo mes vienes un fin de semana— le miró con tristeza pero asintió y se desmuteo, no quería tener problemas con el.

—no tenemos tiempo, tranquilízate, vendimos nuestro hogar y tenemos ya una casa en Seúl— escuchó un golpe seco a través de la línea.

—¿Estuviste de acuerdo o Jeon te obligó?— su pregunta lo tomo por sorpresa y no supo que decir.

—Taehyung, sabes cuánto era el valor sentimental de esa casa, dudo mucho que hayas estado de acuerdo con venderla— se sintió acorralado, desde el principio Namjoon y Jungkook no se llevaban bien y no quería incrementar esa tensión.

—Pasame el celular— el alfa frenó en seco y se arrimó a un lugar para aparcar, temblando el omega le pasó el celular.

—Mira Namjoonsito, vete a joder a otra parte, tu casita ya se vendió y no hay nada que hacer, no tenemos tiempo para tus despedidas ni estupideces— Tae empezó a llorar al sentir ese miedo de su esposo.
—pero no te preocupes, el próximo mes te dejo ver a tu hermanito un fin de semana, y vete a la mierda con lo de obligar, es mi omega y yo hago con el lo que quiero— colgó la llamada y apagó el celular para luego tirarlo hacia la parte trasera del coche.
—¿Ya vas a llorar otra vez? Eres un débil de verdad, no aguantas nada, solo exageras— secó con su mano bruscamente las lágrimas del omega —ya deja de llorar, si te quieres ir con tu hermanito— no termino de hablar y Tae se estaba disculpando con el y pidiéndole que no lo abandonará.



—cariño ¿Nos podemos ir a vivir a Seúl?—.

—gracias por considerar mi opinión Nam, y todo sea por abrirle los ojos a Tete—.

𝙸𝚗𝚏𝚎𝚛𝚝𝚒𝚕𝚎 & 𝚄𝚜𝚎𝚕𝚎𝚜𝚜 ~ °𝐊𝐨𝐨𝐤𝐕°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora