𝑇𝑢 𝐷𝑢𝑙𝑐𝑒 𝐴𝑟𝑜𝑚𝑎

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-Estoy agotado, necesito una siesta- se quejó Zoro mientras caminaba, sentía un leve dolor en la espalda, todo gracias a permanecer sentado por tantas horas.

-Pero si Zoro se la pasó durmiendo todo el vuelo Shishishi- río divertido Luffy a la vez que tomaba una de las maletas del peliverde para aligerarle la carga.

-No es lo mismo dormir en un asiento de avión que en tu cama- dejándo de lado su incomodidad, notó que ya se encontraban fuera del aeropuerto, así que lo siguiente en la lista era buscar un taxi -De verdad nadie estaba libre para venir a recogernos?- refunfuño al recordar que ni uno solo de sus conocidos se hallaba presente en el lugar para darles la bienvenida.

Hace cuatro años que no regresaban a Japón y es que, no es lo mismo venir de visita unos días que regresar para quedarse, sin embargo, ni su padre, ni sus amigos más cercanos se habían mostrado -No puedo creer que ni siquiera tus hermanos hayan venido por ti Lu- cómo podría olvidar los primeros días que pasaron fuera de Japón, sus cuñados sin falta llamaban cada día al azabache para preguntarle si había comido lo suficiente, si cumplía con sus deberes, que tal le iba en la escuela, entre otras cosas cotidianas, pero ahora mismo no se dignaban en aparecerse.

-Recuerda lo que nos dijeron Zoro, todos están ocupados hoy- dijo Luffy con una sonrisa nerviosa, no estaba mintiendo, el sabía que sus amigos tenían el día atareado.

-Mi padre tiene demasiados pendientes en su trabajo, Nami tiene una entrega importante de su huerto, Ussop acompañará a Kaya a una cita médica, el cejas de sushi tendrá un evento en su restaurante, y tus hermanos... tus hermanos que estaban haciendo?- preguntó el mayor al no recordar la razón por la ausencia de los hermanos mayores de su novio.

-Mira Zoro allí están los taxis!- dejando el tema de lado, Luffy apresuró su paso para llegar a dichos vehículos, el contrario le siguió, pues entre menos tiempo pasará para poder llegar a su hogar, mejor.

Después de guardar el equipaje en el maletero, la pareja se monto en el taxi. El recorrido no se les hizo tan largo, ya que aprovecharon para disfrutar del paisaje, charlar sobre los cambios de algunos edificios, la construcción de otros nuevos, y más cosas en general, cuando menos se lo esperaron, ya estaban de pie frente a la casa de Zoro.

-Lu no tenías que acompañarme, de seguro también estás cansado- le comentó el mayor a su novio, quien había insistido en ir a la casa de él antes que a la suya.

-P-primero tengo algo importante que hacer aquí- pronunció algo nervioso, repasando en su cabeza los siguientes movimientos que haría, ya lo había ensayado varias veces, pero justo ahora había olvidado por completo todas las palabras que quería decir.

-Estás bien Amor?- preguntó preocupado al ver que el rostro de su pareja se comenzaba a tornar rojo y pequeñas gotas de sudor aparecían en su frente. El monito no quería arruinar lo que ya había planeado así que respiro profundo y se tranquilizó.

-Zoro recuerdas esa apuesta que hicimos aquí frente a tu casa?- Ya calmado y dejando los nervios a un lado, Luffy se acercó al mayor y le abrazó por detrás, apoyando su mentón en uno de los hombros del omega para poder aspirar mejor su rico aroma.

-No- negó con una sonrisa, al ver que su azabache ya estaba mejor

-Fue de los primeros días que llevábamos de novios shishishi- mencionó dejando un beso sobre la mejilla de su chico.

-Mmm... no lo recuerdo para nada- volvió a negar sobre las memorias de las que Luffy le hablaba.

-Yo creo que Zoro si lo recuerda, pero no quiere decirlo ya que perdió