7. ¿Tu cuarto o el mío?

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Mismo día en la noche - En el departamento

- ¡Mierda! - era la única forma de expresarse que tenía sana cada vez que miraba el reloj. Ya era la una de la noche y no había indicios de que Tzuyu pisara el departamento. Apenas pasó la puerta del estudio de tatuajes, salió decidida a esperar a que la chica llegara a su departamento y hacerle las miles y miles de preguntas que tenía dándole vueltas en la cabeza desde que la conoció. Pero esperar a Tzuyu no estaba siendo nada fácil.

La tarde entera había sido un suplicio. Primero fue Momo quejándose por todo, desde la poca presión que sana había puesto sobre Tzuyu acerca del tatuaje, hasta de como Dahyun le había dado el teléfono a ese "chico, que seguramente recién había salido de la cárcel" según palabras de la misma japonesa. Por supuesto que esto desató una pelea entre ambas chicas dejando nuevamente a Bambam, que aún seguía un poco agitado por el susto que le pegó Tzuyu, y a la misma sana entre medio de ellas nuevamente. Y por supuesto que después de eso todo siguió con Dahyun yéndose a dormir al departamento de Bambam y con Momo yendo a algún bar de mala muerte a buscar cualquier chica con quién pasar la noche. Objetivo que la Japonesa cumplió a la perfección, porque horas más tarde, cuando sana estaba empezando a leer un libro que le ayudará a pasar más rápido el tiempo, su amiga cayó con una rubia ebria que fue a parar derecho a la habitación de su socia. La pelea de Dahyun y Momo fue el único momento que sana no quiso ver que Tzuyu apareciera por la puerta, si llegaba a ver la dramática forma en que Dahyun lloraba y la exagerada forma en que Momo la trataba, la empresaria estaba segura que se quedaba sin su socia. No conocía a tzuyu, pero la forma en que se había preocupado por la bailarina, sana dedujo que la pelicastaña tenía un lado protector muy desarrollado.

Otra de las cosas que sana optó por hacer ese día con vistas a qué el tiempo fuera más rápido, fue llamar a sus padres. Ella venía de una familia muy unida y dónde el respeto, cariño y comunicación nunca habían faltado, por eso tanto sus padre, su hermana o ella, se encargaban de hablar a diario y de decirse cuánto se extrañaban.

La conversación con su padre fue desde campeonatos de golf, a obligar a que sana le prometiera que los iba a visitar, a cuánto extrañaban a sana en los Angeles, a recordarle cuanto Sōta detestaba al vago de su novio, hasta los negocios de sana en New York. Por su parte Lina, su madre, le contó acerca de cada preparativo que la pareja estaba llegando a cabo para el aniversario de sus bodas de plata, le chismeo acerca de su vecino y la manía del hombre de mirar a su madre mientras está toma el sol en la piscina, despotricó también en contra de su novio y finalmente, para sorpresa de sana, le preguntó por Tzuyu.

Ahora bien, estos días últimos temas consultados por cada uno de sus padres, eran dos mundos distintos para sana. Mientras en los negocios la pelinegra se movía como un pez en el agua, con Tzuyu parecía el padre de Nemo entre las anémonas, sabía que si hacia un paso en falso se podía quemar o algo parecido. Sana tenía un talento natural para los negocios, ya desde chica lograba que el estúpido vecinito de la casa donde creció, le cambiará el delicioso helado de dulce de leche cubierto de chocolate por su manzana, para ella era simple y todo le resultaba a su favor. Con la pelicastaña era distinto, con Tzuyu sentía que perdía cada vez que hacía un intento para acercarse a ella. Con la tatuadora sana sentía que era la última en ser reconocida, Tzuyu no parecía tener la misma debilidad que ella sentía por la pelicastaña...en fin, todo el mundo Tzuyu le era desconocido y eso la frustraba cada vez más. Por eso después de que se encargó de contarle a su madre la poca información que tenía, estuvo más decidida que nunca a quedarse hasta la hora que sea a enfrentar a la pelicastaña, su madre le había hecho ver cosas que quizás a ella se le estaban pasando y por eso ahora estaba recostada en el sillón, con uno de sus libros preferidos y cada vez que miraba el reloj y volvía a insultarlo - ¿Cuando llegarás Ch...?

'I am not for you | SatzuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora