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Ahora Haruchiyo se sentía complementado, se sentía amado por primera vez.
El pelirosa continuó jugando con Rui le encantaba pasar tiempo con él, hace poco compró una cámara para tomarle fotos a su bebé, quería tener fotos con él.
–Sanzu, ¿Nos vamos?.
–Espera Ran, falta poco, espera con Riu en el coche, me falta la cámara.
–Sanzu debes dejar de tomarle fotos al bebé.
El pelirosa tomó la cámara de uno de sus cajones de su escritorio para luego meterla al bolso con todo lo necesario para este viaje.
Ambos subieron al carro mientras Sanzu acomodaba al bebé en el asiento trasero, la mucama también los acompañaría, Rindou ya los estaba esperando allá.
Hoy cumplían 2 meses de estar con su bebé, debían celebrarlo, Kokonoi también iría junto con ellos al viaje, después de todo él se encargó de cuidar a Rui cuándo Ran o Sanzu no estaban.
Esto era como un cuento de hadas para Haruchiyo, tal y como los leía en los libros, todo era felicidad por ahora...no por completo, tuvieron un par de discusiones, sí, pero todo se solucionó, Ran se contenía de aplicar sadismo con Haruchiyo en la cama.
Talvez Ran sí está cambiando.
Talvez Ran sí quiere estar con Haruchiyo y el bebé después de todo.
–Ran... Agradezco mucho que lo estés intentando.
El mayor de los Haitani desvío su mirada al pelirosa para luego tomar su mano y acariciarla, tenía sus momentos tiernos.
–Sanzu, créeme que lo intento, me estoy esforzando para mejorar por ti.
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Kokonoi continuó jugando con el bebé, el peliblanco le había tomado un gran cariño al niño.
–Bien... creó que ya es hora.
–¿Hora de que? Kokonoi, ¿Estás volviendo a hablar solo?.
Kokonoi salió de la habitación para luego ir a la cocina y traer una caja con orificios a los costados, dejo la caja en el suelo al lado de Rui para luego acariciar el cabello del bebé.
–Este es el regaló de Rui, no estoy hablando solo Rindou.
Sanzu abrió la caja con curiosidad mientras sacaba al felino de la caja para luego enseñárselo a Rui y que el bebé mirara atentamente al gato.
–Parece que le gusta, ¿Cuántos meses tiene?
–3 meses, Mia dio a luz a 7 gatitos y pensé que sería buena idea traerle este de regaló a Rui.
–Wow, interesante, la única chica que soporta a un Alfa tan insoportable como tú Kokonoi.
–Continua con tus burlas Rindou, al menos yo no soy virgen a los 16.
Sanzu miró seriamente a Kokonoi mientras Rui continuaba jugando con el felino.
–Kokonoi, no digas esas cosas en frente de Rui.
Al llegar el anochecer comenzaron a beber, el bebé ya estaba dormido y la mucama lo atendería sí se despertaba.
Ran termino de beber su segunda botella de tequila, Kokonoi y Rindou terminaron muertos en el sillón, era casi media noche, una vez ya estando en su habitación Ran se acercó peligrosamente a Sanzu para luego besarlo con brusquedad.
–R-ran~ Detente!!! Dijiste que cambiarías.
El mayor de los Haitani lo volvió a hacer, no podía evitarlo por mucho, deseaba tener nuevamente a su Omega en sus brazos, amarlo de la forma en la que más le gustaba.
Sus embestidas eran violentas, no tenía piedad con el delicado cuerpo de su Omega, los gemidos se escuchaban hasta la habitación de Rindou, el no podía interferir con los problemas de su hermano y Sanzu.
Dijiste que cambiarias, gracias a ti estoy llorando mientras me corro.
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Gracias por leer.
Perdón sí el capítulo es algo corto, lo compensaré mañana posiblemente.
Sí hay fallas ortografícas pueden corregir.
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𝑆𝑜𝑙𝑜 𝑀𝑖𝑜
Fanfiction⚠︎ 𝐴𝑛𝑡𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑞𝑢𝑒 𝑐𝑜𝑛𝑡𝑖𝑛𝑢́𝑒𝑛 𝑐𝑜𝑛 𝑙𝑎 𝑙𝑒𝑐𝑡𝑢𝑟𝑎,𝑐𝑎𝑏𝑒 𝑎𝑐𝑙𝑎𝑟𝑎𝑟 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑛 𝑒𝑠𝑡𝑒 𝑙𝑖𝑏𝑟𝑜 𝑠𝑒 𝑡𝑜𝑐𝑎𝑟𝑎𝑛 𝑡𝑒𝑚𝑎𝑠 𝑠𝑒𝑛𝑐𝑖𝑏𝑙𝑒𝑠 𝑒𝑛𝑡𝑟𝑒 𝑜𝑡𝑟𝑎𝑠 𝑐𝑜𝑠𝑎𝑠 𝑎𝑞𝑢𝑖 𝑙𝑒𝑠 𝑑𝑒𝑗𝑜 𝑢𝑛 𝑒𝑛𝑙�...