El futuro del reino de corea estaba en manos del Príncipe Felix, el heredero al trono y hijo único de la familia Lee y Han. Felix siempre se había dicho que el seria un alfa y guiaría a su pueblo como le enseñaron, pero que pasa si el destino le hac...
Felix se levantó emocionado de su habitación saludando a la mañana como si esta no fuera un dia comun de lo que ya era, las sirvientas se dieron cuenta de lo tan emocionado que se encontraba, esperaban que el príncipe tuviera todos los con esta misma emoción de siempre, Felix bajo a la mesa en donde hacia su padre Han sentado en ella.
— Buenos días – se acercó a la mesa para sentarse junto a su padre, su padre dejó de lado el periodico para direccionar su atención a su hijo— que lees, no es común verte pendiente con el periodico.
— El cumpleaños del joven Renjun es tendencia al parecer — felix dirigio su mirada al periodico que hacia con la foto de aquel chico impresa — es muy hermoso, "el joven omega que logró cautivar a la duquesa Moonbyul", todos están elogiando a la duquesa por tener gustos muy "refinados" y por ser la mujer alfa con dos esposos omegas y eso no es todo, al parecer es el omega mas perfecto que podría existir, tanto que compite como el omega mas hermosos, logrando vencer al esposo del rey y el príncipe.
— Enserio, que los alfas son raros — dijo Felix con molestia —
— Tu, querias ser ese alfa –
— Vamos a ir a la fiesta —
— Fuimos invitados cordialmente de parte de la duquesa Moonbyul, asi que creo que tendremos que ir aunque no queramos —
— Y.... papá? a dónde se fue —
— Se fue a hablar con el primer ministro, están en una reunión importante – dijo Jisung posando sus labios en la tasa de té, Felix miró a su padre frunciendo el ceño.
— Puedo saber, que cosas son tan importantes –
— No creo que te interese, es algo que tu padre se tiene que encargar.
— La verdad es que si me..
— Porque no comes tu desayuno — Jisung tomo un panecillo que hacia en la mesa poniéndola en el plato de Felix — pruebalo, esta delicioso con la mermelada.
Felix volvió a mirar raro a su padre, sabia que algo no andaba bien, desde que apareció ese cuerpo en el jardín, el escudo de los carroñeros, el disparo que sufrió en su hombro, junto al intruso que estuvo en el palacio... todo parecía ir de cabeza, nadie quería contarle lo que estaba sucediendo, su padre trata de desviar el tema cuando quiere preguntarle y su otro padre que es el rey peor. Algún momento sabré lo que sucede, alguien tiene que abrir la boca.
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— Primer ministro – dijo Minho estrechando su mano junto con Chan —
— Majestad, es bueno verlo mejor después de su viaje — ambos tomaron asiento en los dos sofás que hacían en el cuarto real del palacio —
