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POV SUNI

Jay y yo nos adentramos en la casa dejando al australiano y al japonés fuera. Una vez llegamos a mi habitación, Jay habló.

─ Mientras tú te cambias, yo iré a buscar mis cosas y hacer el cambio con Jake ─ Me dijo con mucha seriedad.

─ ¿Por qué haces esto, Jay? ─ Le pregunté confundida.

Él no me respondió y se dirigió a su cuarto. Yo entré al mío e hice lo que me pidió Jay. Me quité toda la ropa mojada y la tendí para que al menos mañana esté seca, y me puse mi pijama.

Me recosté en la cama y empecé a mirar mensajes. Vi que todavía ni mi padre ni mi abuela me habían llamado, esto me parecía extraño. De un momento a otro, alguien picó la puerta, era Jake.

─ Hola Suni... Vengo a por mis cosas ─ Dijo riendo nervioso.

─ Claro... Pasa, tranquilo ─ Volví a mi lugar y seguí revisando mi teléfono.

─ Lo siento mucho por lo que hice... bueno, hicimos, también Ni-ki está en este asunto ─ Ríe levemente. ─ Lo siento mucho, solo queríamos divertirnos un poco, pero no pensamos que todo esto iba a llegar tan lejos ─ Confesó.

─ No te preocupes, no estoy enfadada ─ Mi vista se dirigió a la cara del australiano y le sonreí. ─ Ahora estoy confundida por el comportamiento repentino de Jay ─ Cambié mi cara a una de confusión.

─ A Ni-ki y a mí también nos pareció raro. Él normalmente se enfada, pero, no hasta llegar a este punto ─ Este me mira de la misma manera que yo. ─ Debería irme antes de que Jay me pille hablando contigo y no haciendo lo que me pidió, así que, hasta mañana Suni, que descanses ─ Me regaló una enorme sonrisa.

─ Igualmente ─ Hice el mismo acto y me despedí de él con la mano.

Pasaron 5 minutos desde que se fue Jake, y por la puerta se pudo ver a un americano con todas sus cosas entrando a la habitación.

─ Jake ya se llevó todo ─ Le dije a Jay mientras me dirigía al baño.

─ Lo sé, lo vi saliendo de la habitación ─ Me respondió todavía serio.

─ ¿Estás enfadado conmigo? ─ Le pregunté confusa.

─ No, contigo no. Con Jake y Ni-ki, sí ─ Me respondió mirándome a los ojos fijamente.

─ Sólo fue una broma, no hace falta llegar hasta este pun-... ─ No pude terminar, Jay me interrumpió.

─ No me gustan este tipo de bromas, entiendes. Y además, ellos sabían que decias la verdad, pero aun así, te ignoraron y te tiraron a la piscina ─ Me respondió mientras se acostaba en su cama.

─ Entiendo... ─ No quise hablar más porque se veían desde lejos el enojo de Jay, así que lave los dientes, me eché los productos para la cara y fui directamente a acostarme.

Iba a apagar la luz pero Jay me habló.

─ No permitiré que esos chicos te hagan algo ─ Dijo mientras señalaba la puerta, haciendo referencia a los demás integrantes. ─ y si es el caso, tranquila que el castigo les llegará en algún momento ─ Se giró para verme y me dió una sonrisa de lado.

─ No hace falta que hagas todo esto, dejalos que se diviertan, ¿si? ─ Le sonreí.

─ Está bien, pero si hacen algo que tú no quieres, tendrán su merecido ─ Me respondió y se dió la vuelta de nuevo. ─ Buenas noches, que descanses.

─ Igualmente papá protector, que descanses ─ Escuché una risa de parte de este y apague la luz para que minutos después, quedará profundamente dormida.

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