~su majestad~ // Enzo F. x Julián A.

OO4 → «su majestad, me ha decepcionado.»

amaneció de maravilla.

la noche anterior la pasó muy bien con su soldado; luego de esas dulces palabras, dieron un paseo por el jardín y luego se sentaron en un banquito que había ahí. Hablaron de sus realidades, luego de sus sueños.

recuerda cuando tuvieron esa charla no tan común entre ellos:

“— mi sueño siempre fue ser alguien importante para usted.

el castaño lo miró atentamente. — pero lo eres.

— por supuesto y estoy agradecido por ser su fiel compañero, su mano derecha, su soldado de confianza, su amigo. Pero-

— no solamente sos eso.

— ¿Ah, no?

— no. — miró las flores. — usted es mucho más que eso... Es como mi hermano, alguien muy especial para mí.

el mayor agachó su cabeza, un poco desilusionado, pero se lo veía venir.

— ¿Usted tiene miedo?

— ¿miedo a qué? Soy un rey, no debo temerle a nada.

— ¿Aceptar un relación de su mismo sexo?

— no. Es lo más normal que pueda existir en estos tiempos.

— pero sabe que las altas autoridades no lo ve como "normal".

— mmm, no. Pero sé que se podría hacer algo.

— entonces... ¿Hay probabilidad de que pueda ser su... Algo?

Algo. Eso es lo que rondaba en la cabeza del castaño, ¿de verdad estaba tan desesperado por ser dueño de su corazón?

— suficiente, soldado. No está bien decir eso.

— pero acaba de decir que es lo más normal.

— pero usted es mi soldado, entienda. ¿Cuándo has visto que un rey tenga una relación amorosa con su soldado?

— ¿Está considerando tener una relación con su soldado? — sonrió de lado.

— no es lo que dije.

— su majestad, en serio le hablo. ¿Consideraría que tengamos una relación?

— ¿no?

— ...está bien. — se levantó del banquito.

— ¿A dónde va? — vió al morocho marcharse del lugar.

— iré a tener un consuelo. — llegó hacia su caballo.

— ¿Consuelo? — se levantó.

— exacto, mi señor. — lo miró.

— ¿Quién es su consuelo? — se acercó a su soldado.

— ¿Por qué le interesa?

— recuerde que soy su rey y debo saber dónde va mi más fiel compañero. Además, no puede desaparecer, necesito de su servicio.

— bueno.. no creo que necesite de mi servicio ahora. — acarició la mejilla de su menor. — me ausentaré esta noche, el consuelo es algo que va a poder calmar mis pensamientos.

— dígame quién es su consuelo.

— ¿Se molestaría si le digo que aún no lo sé?

el castaño quedó confundido. — pero, ¿estás haciendo esto por mi rechazo?