Era el día del estreno y todo el mundo corría de un lado para otro, solo quedaban unas horas para que la función comenzara y Scarlett había acabado con su trabajo allí; al menos el de la primera parte. Luego el escenario cambiaría y tendría que estar presente para ver que no hubiera errores. Estaba siendo un estrés de día, organizando los estilismos de peluquería, vestuarios, maquillaje, escenario... Estaba ajetreada pero le encantaba todo eso y lo que era mejor, estaba saliendo de maravilla.
En esos instantes estaba acabando de vestir a los actores y por suerte los trajes que había cosido no habían sufrido muchas alteraciones, por lo que seguían yéndole bien a los protagonistas.
—Muchas gracias de verdad Scarlett, prometo no volver a estropearlo —le dijo María mientras le estaba ultimando el bajo del vestido.
—A ver si es verdad, que no quiero volver a pasarme todo un día cosiendo. —No estaba enfadada pero si pasara una segunda vez entonces sí que ardería Troya.
—Descuida, a partir de ahora lo cuidaré como si de un collar de doscientos mil euros se tratase. —Rio.
—Eso espero —dijo poniéndose frente a ella—. Estas preciosa, ahora ves y muéstrales mi obra de arte. —Rieron.
—Eso está hecho. —María la abrazó.
—Mucha mierda.
—Gracias —dijo mientras ya corría hacia el escenario.
Después de recoger el material que había usado para arreglar el traje de la actriz, Scarlett se encaminó por los pasillos del teatro para llegar a la parte de detrás del escenario. Se posicionó en un punto donde podía ver la obra y no ser vista por el público; la verdad es que el teatro estaba lleno y estaba teniendo mucho éxito. A pesar de haberla visto infinidad de veces, algunas escenas eran tan graciosas que se le ponía la sonrisa en la cara. No obstante, al cabo de un rato fue a preparar el decorado de la siguiente parte para que fuera más rápido el cambio de escenario. Estaba todo perfecto, le encantaba que las cosas salieran bien.
—Scarlett —la llamó Lara, su ayudante—. ¿Llevamos esto ya hacia el escenario?
—Sí porque el cambio de escena está a punto de producirse, rápido por favor. — Ordenó a los chicos que las ayudaban a llevar y traer las cosas. Ella también se puso a dar órdenes y a ayudar para que en cuanto se apagaran las luces, pudieran llevarlo a cabo lo más rápido posible.
Una vez pasó el cambio de escena todo se calmó por detrás del escenario, y Scarlett fue a mirar como estaba quedando y si la gente se lo estaba pasando bien; siempre desde la lejanía, claro. Observó al público, la gente sonreía y estaba disfrutando, aunque no todo el mundo, le llamó la atención un hombre moreno guapísimo, que aunque estaba oscuro y no se veía muy bien, se notaba que estaba allí a disgusto y que no le estaba gustando nada la obra. Scarlett pensó que seguramente estaba acompañando a su novia y se le formó una sonrisa. Desde allí parecía que tenía los ojos dorados, por eso lo había visto en la oscuridad, eran hipnotizadores, aunque seguramente sería por el reflejo de algún foco. Miró a su lado y solo vio a otro chico rubio igual de guapo, ¿eran gays? Este último sí que sonreía y parecía estar disfrutando. Los dos sobresalían entre la gente, eran demasiado guapos y algunas chicas les estaban prestando más atención a ellos que a la obra.
De repente Scarlett sintió como el chico moreno la estaba mirando con intensidad. Se quedó paralizada mientras su corazón comenzó a latir desbocado sin razón aparente, quizá solo era una paranoia suya, pues desde tan lejos él no la podía ver bien, y si además le añadía que ella estaba en la penumbra..., no era posible que la viera. Pero sentía que la estaba observando... ¿Enfadado? Se llevó las manos instintivamente al pecho, como protegiéndose. Los ojos dorados de aquel hombre parecían estar encendidos como dos pozos de oro fundido, era fascinante y a la vez aterrador, nunca antes había visto algo así. Sintió un poco de miedo y se retiró para ir al baño y tranquilizarse. Había sido una sensación muy extraña.
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El escudo de los Dioses
RomanceScarlett Bouclier está cumpliendo su sueño de ser directora de arte en una pequeña compañía de teatro, pero todo cambia en un segundo y, la aparición del misterioso Nick y su hermano Ares, un moreno de ojos dorados y actitud enfadada con el mundo, h...