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Había despertado ya hace una media hora, o más, pero no me atrevía a salir de la habitación, los nervios me estaban comiendo por dentro, ayer no pensé muy bien lo que hice y me dejé llevar por la calentura del momento, cosa de la cual me arrepentía, ahora todo será incómodo entre Geon-Woo y yo.
Después de pensar unos minutos más me decidí a salir, al parecer todos seguían dormidos ya que toda la casa estaba en silencio, camine hasta la sala y allí estaba Geon-Woo, estaba en su celular al parecer hablando con alguien por mensaje. Al parecer notó mi presencia ya que volteó a ver hacia mi dirección, me dio una sonrisa de lado y siguió hablando con quien sabe quien, bien, agradezco que no sea incómodo, y al parecer él estaba dispuesto a olvidar lo qué pasó la noche anterior en el pasillo, por lo cual yo también decidí hacer lo mismo y dejar pasar lo de anoche. Me dirijo a la cocina la cual estaba a tan solo unos pasos de la sala, agarre un vaso y lo llene con agua, en eso escuche el ruido de la puerta de una habitación, me asomé y en vi como la señora Yoon salía de esta y caminaba en dirección a la sala.
—Buenos días, ¿les puedo contar algo?, ayer en la noche escuché unos ruidos— Me atraganté con el agua y rápidamente la señora Yoon caminó hacia mi y me dio unas pequeñas palmadas en la espalda, cuando vio que me había calmado siguió hablando— Creo que las ratas volvieron, voy a tener que ponerles alguna trampa así que tengan cuidado por donde caminan.
Volteé a ver a Geon-Woo y este ya tenía su mirada fija en mi, sus ojos desprendían picardía, y en sus labios había una sonrisa, rápidamente quite mi mirada de la suya y mire a la señora Yoon, la cual seguía hablando de donde pondría las trampas para que las supuestas ratas.
—Mamá, iré al hospital a que me curen las heridas— Geon-Woo se levanto y caminó hacia la entrada del apartamento.
Antes de que se pusiera las zapatillas le dije que si lo podía acompañar, porque necesitaba pasar a comprar unas cosas y el hospital al que iría estaba cerca de una mini tienda en donde estaba lo que necesitaba, él no se negó y me espero en lo que me fui a dar una ducha rápida, me cambiaba y obviamente me maquillaba un poco, podría estar llena de hematomas pero no andaría por la calle luciéndolos, así que intente cubrirlos lo más que pude, cuando ya estuve lista salí de la habitación y en la sala estaba Geon-Woo sentado esperándome, cuando me vio se levantó y caminamos hacia la salida, nos despedimos de señora Yoon y salimos, Geon-Woo cerró la puerta, caminamos unas cuadras hasta que un chico se nos acercó, bueno se acercó a Geon-Woo, este último lo codeó y con su cabeza me señaló, haciendo que el chico de cabello largo me volteara a ver y me saludara, al parecer se llamaba Woo-Jin, se notaba que ellos dos eran buenos amigos.
Woo-Jin le devolvió el codazo a Geon-Woo y se rio, haciendo que Geon-Woo sacara sus manos de la chamarra que traía y darle un puño a Woo-Jin, al parecer pegaba fuerte ya que Woo-Jin se empezó a quejar del dolor, haciendo que Geon-Woo se riera, contagiándome en el proceso.
Llegamos al hospital y allí nos separamos, me despedí de ambos y mientras vi como ellos entraban al hospital yo avancé unas dos cuadras hasta que vi como una pequeña farmacia, entré en ella, busqué unas toallas sanitarias, ya que me estaba apunto de venirme, y mejor prefiero prevenir, y no causar ninguna incomodidad a la señora Yoon o a Geon-Woo, cuando llegue a la caja vi como cerca de ella habían dos policías, estos se me quedaban viendo, uno de ellos sacó su celular y le enseñó algo al otro policía, me apresuré a pagar, y cuando vi que los policías se estaban acercando camine lo más rápido que pude, sin correr, ya que no quería levantar ninguna sospecha.
