Luna Tormentosa [Acelu]

Segunda Noche

♱ Primera Vez ♱

Narra Luffy:

Tal vez el querer probar de todo sin ningún límite no era muy buena idea como lo imaginé, estuve tomando todo tipo de tragos que Nami ponía frente de mi y gracias a eso ahora estaba mareado mientras trataba de buscar el maldito baño, tal vez sería mucho más fácil si el maldito piso no se moviera cada dos por tres.

Al final logré encontrar los baños, después de entrar y de hacer mis cosas, salgo y me tiro un poco de agua fría en el rostro, esperando a que lo mareado se me baje un poco, cuando logré sentirme mejor salí de los baños, iba a volver con Nami y Sanji al segundo piso, cuando un olor muy dulce llamo mi atención, un olor bastante apetitoso, entre más lo huelo mi conciencia se pierde, trague en seco ¿Esto no es lo que estoy pensando, verdad?

Sacudí la cabeza, recuperando un poco de lucidez, tal vez solo estoy más borracho de lo que pensé, tal vez solo era mi imaginación, doy un par de pasos hacia adelante, cuando aquel olor se hace más intenso y entonces mis ojos lo encuentran, un chico bastante más alto que yo, cabellos largos y ondulados, pecas y lleno de tatuajes, lo supe al instante, ese chico iba a ser mi primera víctima, mi corazón comenzó a latir con fuerza cuando sus ojos se cruzaron con los míos, mi respiración se cortó cuando noté que aquel chico se acercaba poco a poco a mi, tal vez también había llamado su atención.

- Hola, nunca te había visto por aquí ¿Eres nuevo? - Me hablo con media sonrisa.

Trague en seco, su voz era bastante profunda, tan atrapante - Si.. acabo de llegar al pueblo - Mentí, según mi padre eso era lo que tenía que decir cuando algún humano me lo preguntará, así evitaríamos levantar sospechas.

El de cabellos ondulados alzó una ceja y me miró con una sonrisa aún más grande - ¿Enserio? Es bueno tener caras nuevas por este lugar ¿Te gustaría tomarte un trago conmigo? -

Tal vez debí decir que no, tal vez debí dar media vuelta y regresar con Nami y Sanji, tal vez así hubiera evitado toda la historia que se desencadenaría después, sin embargo, en esos momentos mis instintos eran mucho más fuertes, impulsándome a seguirlo y clavar mis colmillos en su cuello y bueno, yo no era una persona muy racional que digamos, así que termine siguiéndolo.

Aquel chico misterioso tomo mi mano y me guio hasta un lugar bastante apartado y solitario, se trataban de unas cabinas, un lugar cerrado con una sola mesa y sillas acolchadas, no tenía ni idea que algo así existiera en este lugar, solo le di un vistazo rápido al cuarto al que habíamos entrado, total, tampoco había mucho que observar, tomé asiento un tanto alejado de mi acompañante, me estaba mareando con el olor que provenía de él.

Los vampiros no solíamos tener un olfato tan desarrollado cómo los lobos tenían todo el tiempo, sin embargo podíamos afinarlo un poco más cuando estábamos al límite, cuando los instintos cazadores salían a flote, todo volvía a la normalidad cuando terminábamos de beber y al no estar del todo familiarizado con estos instintos, esta sed, todo lo estaba viviendo al máximo, estaba abrumado, mi conciencia se estaba nublando y de a poco caía en lo que mi instinto me decía, alejarme un poco de ese chico ayudaba a que no perdiera del todo el control.

Tenía que pensar una manera de morder al tipo sin que mañana por la mañana descubrieran una escena de crimen y aún que intente pensar la manera en la que pudiera beber de su sangre sin matarlo, todo se fue al carajo cuando se sentó a mi lado, pasando su brazo alrededor de mi cintura, sus caricias quemaban, pero sorprendente deseaba más.

- ¿Quieres beber algo en especial? - Me pregunto mientras sostenía la carta de las bebidas.

Trague en seco, claro que quería beber algo en especial, pero dudaba mucho que esa opción estuviera en el menú, por lo que solo sacudí la cabeza, el de pecas me sonrió, dejo la carta sobre la mesa que estaba frente a nosotros y se acercó hasta mi oreja