El ciclo se repetía, todos los días iba a la escuela con la esperanza de acercarme a los Cullen pero me encontraba con un pared fría y rebotaba en ella. Después del intercambió con Carlisle me esperaba que algo cambiara en nuestra dinámica, solo me llamó la atención no solo su actitud de constante rechazo, sino también la vigilancia.
Podía ver y sentir su constante guardia hacia mí, cuando estaba en la escuela todos los ojos me seguían, cuando caminaba a casa de los Stanley podía sentir su presencia, en cada paso que hacía ellos estaban ahí, vigilándome segundo a segundo. Lo cual no solo me molestaba por la falta de confianza de Carlisle al decirle que no era una amenaza, sino en que me estancaba, no me permitía actuar con libertad, no podía arreglar lo que estaba pasando. Y ellos enfocaban sus energías en el problema equivocado.
Si Victoria en serio iba tras Bella deberían estar ocupados en protegerla, no en vigilarme a mí.
Estaba atada de manos, no podía hacer más que llevar una vida normal. Ni siquiera viajar a controlar a neófitos era un plan, porque de alguna manera lo impedirian. Los días pasaban y no sabia que hacer. Tenía un deber que cumplir que pronto se vio bloqueado porque otra vez había fallado.
Llegue al colegio caminando, Jessica tenía práctica de Voleibol así que se iba más temprano de la casa, lo que era bueno ya que no tenía que fingir interés en sus problemas y también porque a ella le caía bien.
Me abrí paso por el pasillo hasta mi clase mientras sentía esos pares de ojos clavados en mí. Pero no fue hasta que me senté en el banco que me lleve la sorpresa.
Alice Cullen estaba a mi lado.
-Hola- saludó alegremente -vos sos Melinoe ¿no?- que estaba pasando, tenía entendido que estaba siendo vigilada por ellos.
-si, soy Melinoe- respondi desconcertada
-¡Yo soy Alice!- volvió a decir alegremente- me alegro que compartamos la clase de biología, quería acercarme hablar pero no encontraba la oportunidad- dijo distraídamente.
-¿Como?- a qué se refería cuando decía que no encontraba la oportunidad.
-Es que siempre estás rodeada de gente- volvió a hablar, restando importancia al asunto, como si fuera culpa mía que ella no me hubiese hablado antes - pero cuando me di cuenta que cursamos biología juntas no fue tan difícil ¿Verdad?- me sonrió mientras me miraba.
- ¿Pasa algo?- pregunté escéptica.
-¿Tendría que pasar algo?- volvió a sonreír.
-Discúlpame es que me es extraño- susurré más para mi que como respuesta.
-¿Por qué habría de ser extraño? Solo quiero conocerte, se que vamos a ser grandes amigas- okey entonces esta era la forma que tenía ella de vigilarme, haciéndose mi amiga. Podía ver el porqué, de todos los Cullens, Alice era la más alegré y fácil de tratar.
-Nada, es que en todo el tiempo que estuve en Forks es la primera vez que hablamos- dije cautelosamente, no queriendo espantarla tampoco. Fueran las razones que fueran que la habían llevado a hablarme, ahora podía conocerla.
No respondió nada a eso, simplemente me sonrió. Así que mi deducción era la correcta, ella intentaba acercarse para saber de mí.
-Así que- estiro la oración mientras me miraba fijamente- se que eres nueva en la ciudad y me preguntaba si estabas libre este fin de semana para hacer algo- dijo sin más reparos. No entendía qué estaba pasando, pero tampoco quise darle muchas vueltas al asunto, después de todo había venido a Forks para conocer de cerca a los Cullens y acá estaba Alice preguntándome para pasar el rato juntas.
-Ha- fue la respuesta más elocuente que se me ocurrió en ese momento- perdón, no esperaba que me invitaras a pasar el rato- respondí con sinceridad sacudiendo la cabeza riéndome- Si estoy libre para hacer algo- le sonreí mientras respondía.
-¡Genial! se que te estás quedando en casa de los Stanley, así que paso por vos el sábado temprano- no fue una pregunta, fue una afirmación y mientras la decía me paso su teléfono indicado que agendara el mío.
El profesor entró y la clase comenzó. Lo que dio por terminada nuestra conversación.
...
El sábado llegó más rápido de lo que pensé, cuando me quise dar cuenta estaba saludando a Laura y dirigiéndome al coche de Alice.
La semana había seguido en su forma habitual, si tenemos en cuenta mi vigilancia diaria, por turnos. Había llegado a saber quien estaba en cada momento conmigo, Esme era la que pasaba más tiempo, pero también era la más relajada, podía notar que no quería estar ahí.
En mi cabeza no podía parar de darle vueltas al peligro inminente, tenía que actuar y estaba viendo como hacer para obtener información de lo que estaba pasando sin tener que moverme o utilizar mis poderes, está noche haría el llamado.
Pero por el momento solo podía encontrarme en el ahora, y ese era en el asiento de copiloto de Alice.
-Quiero hacer una fiesta de graduación en mi casa- me soltó mientras conducía -Y pense que tal vez tendrías ganas de ayudarme- sonrió mirándome. Así que ese era el plan de acción de ellos para vigilarme ahora, mantenerme ocupada. Le sonreí igual, porque después de todo ¿no era esto lo que había venido buscando a Forks?.
-Si, que lindo- dije alentando su idea -¿que necesitas que haga?- pregunté.
-Genial! ya somos dos en el comité entonces- volvió a mirarme sin perder la sonrisa de la cara -Estoy buscando tema para la fiesta- me dijo.
-Bueno, podemos pensar esas cosas juntas, ¿ya tenes vestido?- pregunte con curiosidad
-No, pero podemos buscar juntas también eso- podía ver su entusiasmo por todo esto.
-Y ahora, ¿a dónde estamos yendo Alice?- Pregunte
-Pensé que podíamos organizar las cosas para la fiesta, en casa- otra vez en casa de los Cullens, porque cada vez que uno me recogía terminaba en esa casa.
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BLUE MOON ➛ Carlisle Cullen (editando)
أدب الهواةA Veces vivir eternamente se vuelve cíclico, y más si estamos condenados a repetir nuestros mismos errores. Los personajes de esta historia personajes de la saga crepusculo que aparecen en esta historia le pertenecen a Stephenie Meyer.