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Los meses habían pasado con rapidez y el cabello de Minho ya había vuelto a ser rubio. Minho suspiró por tercera vez en el día, mirando hacia Bang Chan, que hablaba con una muchacha rubia muy bonita. Lo único que sabía es que se llamaba Sana, y que era la hermana de Jennie. No le caía muy bien, pues siempre estaba detrás de Chris y trataba de alejarlo de él.
Y claro, Chris se llevaba muy bien con ella, y le echaba mucha cuenta a la chica. Más que a Minho, por desgracia. Hizo un puchero inconscientemente y apretó un poco a la bebé, que le dio un pequeño manotazo al sentirse apresada por sus brazos.
— Perdona Yeji —Susurró—
La niña lo miró y sonrió, abrazándose a su cuello. Minho también sonrió sin darse cuenta, cuando Chris se acercó junto a Sana hacia él.
— ¡Yeji! —Exclamó la chica, arrodillándose delante de Minho y la bebé—
— Uh...creo que es mejor que no grites —Murmuró bajo, viendo que la niña se apegaba más a él—
— Oh vamos, conozco a Yeji desde que nació...
— Si la conoces entonces deberías saber que no le gustan los ruidos fuertes —Respondió tosco—
Chris solo los miraba, notando la tensión entre los dos jóvenes que se miraban como si se fueran a matar en cualquier momento.
— Uhm... —Carraspeó—
Minho lo miró fijamente, esperando una explicación de por qué dejaba que la chica se acercase a él y a la bebé.
— Sana, ¿nos dejas a solas un rato?
Observó como la chica se acercaba más a él.
— ¿Seguro que quieres que te deje a solas con él? parece que tiene malas pulgas —Murmuró—
El menor no pudo evitar fruncir el ceño. Poco a poco se levantó cargando en condiciones a la bebé y empezó a caminar, descalzo. Oyó como Bang se despedía de la chica y caminaba detrás de él, llamándole. No quiso responder, hasta que llegó a agarrar su mano.
— Minho, ¿qué ocurre? —Preguntó—
— ¿Tu que crees? —Apartó la mano—
— ¿Te molesta Sana?
— ¿Tu crees que es bonito que me digan que tengo malas pulgas? —Frunció su ceño—
— No, ya sé que no —Suspiró— Pero no debes echarle cuenta...
— ¿Por qué no me defiendes cuando ella dice esas cosas, Chan? —Suavizó su voz, más triste—
