"Podía sentir la arena deslizándose entre sus dedos, mientras el sonido de las olas y el canto de las gaviotas se entrelazaban. Tenía los ojos cerrados y un extraño presentimiento que le impedía mirar lo que había frente a él.Un par de brazos lo rodearon cálidamente y sonrió de manera instintiva. Con sus propias manos sostuvo aquellas que lo envolvían, sintiendo una oleada de felicidad recorrer su cuerpo. No entendía exactamente lo que sucedía, pero se sentía tan bien.
De repente el escenario cambió. Ya no podía escuchar las olas rompiendo ni el vuelo de las aves a su alrededor. Todo había quedado sumido en un silencio absoluto, envuelto en la oscuridad y la sensación de vacío. Intentaba quedarse en calma, pero su respiración se agitaba y la desesperación lo invadía" entonces abrió los ojos.
Presente
Desde su llegada a Corea, Jake había estado teniendo problemas para conciliar el sueño.
No importaba cuantas veces diera vueltas entre las sabanas, ni cuanto tiempo pasara contemplando el techo en un profundo silencio que intentaba encontrar reconfortante. Podría culpar a la diferencia horaria, pero sabía que normalmente eso no era un problema para él. Era su segundo amanecer en el país y apenas lograba cerrar los ojos.
Y justo cuando por fin lograba adentrarse en un sueño reparador, el despertador siempre sonaba sin falta, interrumpiéndolo. Era como si estuviera destinado a vivir en una cruel ironía una y otra vez.
Con un gesto de frustración, estiró el brazo hasta alcanzar el artefacto y apagarlo de una vez por todas. Su cansancio era tangible, no solo en su cuerpo, sino también en su mente agotada. Con esa molesta alarma fuera de la habitación, volvió a reinar la tranquilidad, solo interrumpida por el suave ruido blanco de la ciudad que parecía no descansar. Exactamente como lo recordaba.
Nada parecía hacer cambiado mucho: las calles seguían siendo las mismas, los sonidos a su alrededor, los sabores que aún despertaban su apetito. Incluso él mismo, seguía siendo el mismo Jake. Un nudo se formó en su estómago al recordar la noche anterior y una sensación de pesar lo invadió.
Heeseung lo detestaba. Tanto que no se había molestado en ocultarlo.
Jake sabía que al regresar a Corea existía una posibilidad muy grande de que esto sucediera; Jay se lo había advertido. Pero él había sido lo suficientemente obstinado como para ignorarlo, y ahora se encontraba sólo en un cuarto de hotel, enfrentando las consecuencias de su decisión.
No podía engañarse a sí mismo: extrañaba a Heeseung más de lo que podía admitir y, para complicar aún más las cosas, también seguía amándolo. Las circunstancias y equivocaciones de ambos habían llevado a que las cosas entre ellos no terminaran de la mejor manera, puesto que en ese tiempo aún eran demasiado jóvenes e inexpertos. Jake se cuestionaba haber tomado las decisiones correctas.
Dolía tanto pensar en el triste desenlace de su historia, en todas esas promesas que con ella se desvanecieron. Pero lo que dolía aún más era la certeza de que Heeseung había vivido odiándolo desde entonces.
¿Qué tan ingenuo fue al creer que las cosas serían diferentes? Hundiéndose en la ilusión de un amor quebrantado, aferrándose a una esperanza vacía. Después de todo el daño causado, era más que evidente, no puedes querer a alguien que te daña.
Miró su teléfono al escucharlo sonar. Sin muchos ánimos, contestó la llamada.
—¿Vas a lamentarte toda la mañana o me contarás qué sucedió?—. Era Jay del otro lado de la línea.
Jake dejó escapar una risa amarga, sintiéndose predecible —Te odio tanto.
—Gracias Jay, eres un gran amigo. Perdón por haberte dejado plantado mientras iba buscar consuelo en los brazos de Heeseung. Te invitaré a desayunar— dijo imitando exageración.
—Ojalá tuvieras razón.
—¿No fue así?— Jay preguntó extrañado.
—No, no lo fue.
—¿Entonces? ¿Por qué no volviste después de buscarlo?
—Él me odia, o mejor dicho, me detesta, me repugna. Probablemente soy la última persona a la que quiere ver.
—Nada diferente a lo que sabíamos que podría suceder. Recuerda que ya habíamos hablado sobre esto.
—Lo sé, pero es que... realmente pensé que podría haber una posibilidad de que no sucediera.
—Rompiste su corazón. Te lo digo por experiencia, no eres alguien fácil de superar.
—Tú lo hiciste— intentó defenderse.
—Y sabes cuánto me costó. Ahora somos buenos amigos e incluso trabajamos bien juntos. Pero durante esos años, solo el hecho de saber que existías me dolía.
—¿Debería asustarme por eso?— Jake preguntó bromeando.
—No creo que sea necesario—. Ambos dejaron escapar risas ligeras. Jake continuó la conversación luego de un silencio corto.
—¿Qué tanto le dijiste?
—¿A tu novio?— continuó jugando. —Lo que acordamos.
—¿De verdad? él parecía molesto.
—Bueno, el trato era sacarlo de la fiesta... yo solo dije lo que pensé que debía.
Jake rodó los ojos —¿Por qué tengo la sensación de que no te agrada?
—¿Heeseung? ¿En serio? Aunque te resulte difícil creerlo, hubo un tiempo en el que nos tolerábamos—. Eso era verdad, entre ellos las cosas no siembre habían sido interminables desacuerdos, hubo un tiempo en el que ambos llegaron a considerarse buenos amigos.
—A él no le caes bien.
—Y me di cuenta... ¿cómo pudiste olvidar decirme algo tan importante? Me quedé con una versión muy diferente de la historia— reclamó —Escucha te veo en... ¿una hora? ¿te parece bien?
—Esta bien pero, tu eres más grande que yo así que...
—Lo que sea, pero date prisa que siento que no he comido en días.
Jake colgó la llamada, todavía sintiendo una mezcla de emociones en su interior. Sabía que aún tenía asuntos pendientes por resolver y necesitaba encontrar respuestas. Antes de colgar, decidió buscar entre sus contactos el número de alguien más con quien necesitaba hablar.
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Feliz porq hoy salió speak now taylor's version y ese álbum me hace pensar mucho en esta fic :) especialmente last kiss, speak now y back to december 💜
Gracias a las tres personas que han estado leyendo 🙏🏼🙏🏼😭

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save me a seat | heejake
Fanfiction¿Qué pasa cuando encuentras a la persona correcta en el momento equivocado? Heeseung & Jake 🧸🎞️