𝑷𝒓𝒆𝒕𝒕𝒚 𝑺𝒑𝒊𝒅𝒆𝒓

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Spreen y Roier estaban abrazados, el castaño en el regazo del mayor, mientras Rob los miraba a lo lejos. No sentia envidia, estaba feliz y orgulloso de ambos, pero al ver como todos sus amigos tenian pareja (o la gran mayoria) se sintio inseguro, ¿por que nadie se fijaba en el? Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando Aldo se acerco a el, ofreciendole un trago. Este acepto y sonrio, para volver a mirar a la pareja tan tranquila, Aldo mira de nuevo a Robleis y luego trato de posar su mirada en aquello que tenia a Robleis en las nubes.

-Te entiendo, pero tranquilo we, ya lo vas a encontrar.- Aldo puso una mano en el hombro de Robleis y luego miro hacia Slime y Mariana, quienes estaban a punto de concebir un niño- Ejem, me parece que el deber me llama.- Aldo se fue mientras gritaba en direccion a la pareja, que casi casi se desnudaban.

Robleis sonrio, su mirada cambio y sintio que en algún momento llegaria el indicado, como dijo el dichoso Aldo. Tomo el vaso y luego tomo del trago, era de los unicos en la fiesta que podía beber con tranquilidad, asi que dio otro gran trago y se fue a jugar algo para despejar sus pensamientos.

Volviendo con la pareja, Spreen se sentia como en las nubes, tenia su cabeza en el hombro de su pareja y lo abrazaba como si lo estuviera protegiendo. Roier tenia los ojos cerrados, disfrutando el momento y la musica, se dejo llevar por ambos y relajo su cuerpo, el mayor lo noto y acerco el cuerpo de su novio hacia el.

-¿Tenes sueño? ¿Queres que te vaya a dejar?- Roier tomo su telefono y miro la hora: 23:01, probablemente sus padres seguian en "eso" y no lo habian llamado, sus reglas fueron claras "no nos llames, nosotros te llamaremos".

-Nah, estoy bien aqui, además mis papás me dijeron que ellos me llamarian.- Spreen asintio, el castaño se separo el abrazo y quedo mirando a su novio, sonrio y le empezo a arreglar el pelo con ternura.- Eres muy lindo.- Spreen se sonrojo y tomo la mano de su novio.

-Vos tambien, y me superás por mucho.- Beso la mano del castaño y luego acerco sus rostros, a punto de besarse. Pero una figura alta perturbo su paz, camisa desarreglada, corbata mal puesta y lapiz labial hasta en su cuello. Era: Mariana, quien se acercaba a ellos y se sentaba a su lado.- Uh..¿Se te ofrece algo, capo?

-Slime se enojo conmigo, dice que quiere el divorcio el pinche mierdas.- Tomo la botella que tenia en su mano y dio un buen trago.- Inche Aldo, se enojo porque nos interumpio y ahora me echa la culpa a mi, ¿de casualidad no saben si aqui cerca hay un motel o algo?

-Ok ok, no necesitaba tanta info, y no, nunca he ido a un-

-Yo si.- Spreen hablo mientras se apuntaba a si mismo con su dedo indice. Mariana lo miro, entre feliz y extrañado, pero el más "afectado" fue Roier, quien lo miro con cara de "¿y tu como putas vergas sabes?"- N-no mi vida..Osea, escuche una vez a mis papás hablando, y bueno.- Roier lo seguia mirando con esa mirada heredada de Luzu, pero luego miro a Mariana.- ¿Ubicás donde queda el supermercado que casi llega al aeropuerto?- Mariana se quedo procesando y luego asintio con una sonrisa boba.- Bueno, tenes que caminar hacia la izquiera y caminás derecho hasta que se vea una copa y un vino fosforesentes gigantes.- Roier miro de nuevo a su novio, Mariana asintio repetidas veces y se fue gritando "Gracias!".

Luego de unos incomodos minutos, se pudo escuchar a Mariana despidiendose y se pudo ver como Slime y el antes nombrado se iban corriendo de la casa. "Calienturientos de mierda" pensó Spreen. Roier abrazo de nuevo a su pareja y luego se sento a su lado, mirandolo con una cara de inocencia pura.

Roier se armo de valor y tomo su telefono, marco a su mamá y espero por unos minutos. Cuando contesto se pudieron escuchar unos susurros por parte de la pareja, parecian indecisos y enojados.

-¿Mijo? Yo que le dije..¡Zulu, parale! ¿P-pasa algo mijo..?- Roier solo se quedo tieso mientras seguia escuchando pequeños murmuros.- ¿Mijo? ¡Mijo! M-mh..Si quiere irse, se p-puede ir para la casa de s-su tio Rubius..¿Bien? ¡Te amo!- Se corto la llamada, Roier miro su telefono y luego miro a su pareja nuevamente.