𝑷𝒓𝒆𝒕𝒕𝒚 𝑺𝒑𝒊𝒅𝒆𝒓

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Roier estaba en su cama, era de madrugada pero no podia conciliar el sueño ¿porque? Por las palabras "atrevidas" de Spreen. No podia parar de recordar el tono de voz y como lo dijo sin nervio alguno, como si lo hubiera planeado desde hace mucho tiempo, Roier sabia que le gustaba Spreen y ya lo habia admitido hace bastante, pero ¡Dios! Cada vez le gustaba más, sentia que Spreen tambien gustaba de el, pero ¿Y Juan? ¿Será solo un amigo?

Cuando se dio cuenta, ya habia amanecido, estaba abrazando a una almohada y los rayos del sol golpeaban su casa. Al mirar por la ventana, pudo ver a Spreen corriendo hacia su casa, quiza se quedo dormido en el bosque sin darse cuenta, esto le parecio chistoso y rio en voz baja para luego cerrar las cortinas y levantarse. Por alguna razón, no tenia sueño y tenia mucha energia.

Bajo las escaleras y se encontro con sus padres, ambos medio dormidos  y despeinados.

-Mijo, hoy me siento de la verga asi que usted se prepara el desayuno. Me voy a dormir de nuevo.- Quackity paso por atras de su hijo, subio con torpeza y bostezo.

-Buenos dias apa, hoy vas a salir?.- Luzu asintio mientras tomaba algo de su taza y se dirigia a la cocina.- Luego luego voy a ir a la tiendita y voy a comprar algo de comida.

-Ve con cuidado, que ya sabes lo peligroso que es el pueblo ahora.- Roier subio de nuevo mientras decia repetidas veces "si", se iba a arreglar y saldria al instante, queria que ese dia fuera divertido.

Cuando termino de arreglarse, saco dinero y sus llaves, se despidio de su papá y partio apresurado, fue caminando mientras miraba el cielo, el dia estaba bastante feo, parecia que iba a llover, no le importo ya que "solo era agua". Entro a la tienda y vio como no habia nadie, esto le extraño pero pidio lo que necesitaba. La puerta de la tienda se abrio, pero lo ignoro, luego aparecio una figura alta a su lado, lo miro y se encontro con Mariana quien se encontraba medio dormido y desarreglado.

-Que pasa mojon? ¿Te dormiste tarde ayer?- Mariana lo miro de arriba a abajo, parecia no reconocerlo, pero luego le sonrio y le tomo la mano, su personalidad cambio completamente al reconocer a su mejor amigo.

-Disculpa disculpa, Aldo me mando a comprar. Inche flojo, namas le hice caso porque Slime me obligo.- Roier lo miro extrañado, nunca habia oido de un tal "Slime", capaz porque habia estado ocupado pensando en su relacion con Spreen y no pudo pasar tiempo con sus amigos.- Oh cierto, Slime es mi "esposo."

-¿¡QUE?! ¿¡ESPOSO?!- Mariana le hizo un gesto para callarlo, a lo que el se calmo y respiro profundo.- Me hubieras contado, no? Bueno, eres el primero del grupo en casarse, felicidades.- Roier le extendio la mano y Mariana la acepto, sonriendo.

-Luego me invitas a tu casa para conocer a la afortunada.- Roier le guiño el ojo y Mariana respondio con una expresion extrañada.

-¿Afortunada?- Roier al fin capto, Mariana si daba señales de ser joto pero ¿tanto para casarse? Bueno, el estaba feliz.

Luego de comprar las cosas que necesitaban, ambos se fueron por caminos distintos despidiendose. Cuando Roier llego, dejo las cosas en una mesita cercana y miro a su alrededor buscando a sus padres.

-¡MIJO! ¡NO SABE!- Quackity se abalanzo hacia su hijo abrazandolo, mientras que Luzu solo los miraba.- Yo y tu apa nos metimos a una rifa pa ganarnos un viaje humilde por algunas semanitas, y adivine que?.- Roier se encogio de hombros, aun asombrado por el acto de su madre.- ¡LA GANAMOS! -Roier le sonrio a su mamá y a su papá.

-Me alegro mamita chula, eso significa que tengo casa sola?.- Roier sonrio instantaneamente mientras su madre asentia y Luzu iba cambiando su expresion a una seria.

-Pero nada de desvergue, eh? Cuando llegue quiero que la casa este igual como cuando la deje. Ah, y nada de andar invitando a Spreen a cada rato, te voy a llamar todos los dias.- Roier asintio sonriendo y sus padres se fueron a preparar sus cosas, ya que se iban a la mañana siguiente.