Dejate Llevar.

Capitulo 6: "Cena Familiar".

—¿Concierto, tan rápido?

—Si. El tema es que esto es algo que llevo planeando desde hace bastante tiempo. Solo necesitaba que confirmaras que serias parte del dúo.

—¿Entonces estabas segura de que iba a aceptar? ¿Qué sucedía si decía que no?

—Te mostraría como mi otro Jack todavía funciona hasta que aceptaras.

—¿Estas segura de que no eres una sociópata?

—No lo soy, como sea. Nos vemos para la práctica el próximo lunes.

—Sí, nos hablamos.

Hola, ha pasado tiempo. Ahora mismo estoy esperando a que la comida este lista. Finalmente, luego de tanto tiempo podremos comer algo que no sea pan y rastros del almuerzo. Se preguntaran porque, pues fácil. Estamos a nada de que ya sea un nuevo año. ¡¡UN AÑO MÁS QUE SE VA!! Así que aprovechamos para comer de la mejor manera posible.

Pollo y papas fritas.

Bueno, aparte de eso nada en especial a pasado. Mis padres han estado muy callados últimamente. Más bien mi papá se la pasa sentado viendo el televisor, quedándose dormido allí mismo. Se le ve feliz... no, realmente no. Se le ve más cansado de lo usual. Igual no es que importe mucho, casi siempre está cansado.

En cuanto a mi yo me he sentido... ¿Bien? No podría decirlo. Digamos que mi estado de ánimo sigue igual de volátil que otros días. No he visto mejora alguna en ese aspecto si soy sincero y eso me molesta bastante. Pero, al menos tengo algo que hacer aparte de ir a trabajar. Hacer covers con Kyoka ha sido divertido, así que no me arrepiento de haber tomado esa decisión.

—¡¡A COMER!!

Pongo de pie para irme al comedor, pero me detengo al ver como mi viejo se mantenía sentado allí.

—Papá.

—A-ah... sí. Lo siento, ahora voy.

Me doy la vuelta para ir a la mesa y cuando llego me siento en mi lugar preparado para degustar finalmente algo bueno. Llevo tiempo sin hacerlo, hasta podría decir que estoy emocionado. Veo como la vieja sirve la comida en lo que mi papá se sienta al lado mío. Ya preparados para comer, miro mi plato y suspiro.

—Gracias por la comida.

Todos procedemos a comer en completo silencio. Sepulcral diría yo y... tenso. No sé qué paso con estos dos, pero llevo tiempo viéndolos demasiado tensos. ¿Debería preguntar? Mejor no...

—¿Qué tal el día?

—Una bazofia total.

—Sí, mujer. Para ti todo es bazofia.

Realmente ambos están de muy mal humor. Ni se porque pregunte esto. Hubiera preferido terminar de comer e irme a la casa de Kirishima a ver los fuegos artificiales. Ahora parece que aparte de la comida me tendré que comer una de sus tantas discusiones.

—Normal, con un hijo inútil y un esposo que no puede conseguir trabajo. ¿Qué mujer no consideraría su vida una bazofia?

—Solo la mujer que no sabe apreciar el esfuerzo de su esposo e hijo por mantener una casa lo haría. P-peor, que esa mujer se queje incluso considerando q-que ni ella puede conseguir trabajo.

¿Desde cuándo mi viejo responde con argumentos? Esto debe ser un evento único en su especie. Deslizo poco a poco una papa hacia mi boca y mastico.