Capitulo 12

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Capítulo 12

John

Ya habían pasado 2 semanas desde que estamos en el hotel, esta ultima semana fue bastante ajetreada, cansada y preocupante, Alonso padre había enviado un equipo para el apartamento, justo con la policía, encontraron varias minicámaras instaladas, adicionales a las de las áreas comunes que ya tenia mi equipo de seguridad. Así que se pudo ver cuando entro y como Fabio tomaba a nuestra Rookie, Elena estaba fielmente decidida a no regresar, no la culpo. Así que Valeria y Samuel se encargaron de recoger todo lo que fuera necesario.

Estephania y Maritza están siendo mis cómplices para buscar un nuevo lugar, preferiblemente una casa con jardín y espacio suficiente para añadir mas personas a esta familia.

Hoy toca tener inspección en el proyecto que tenemos en el piso catorce de oficinas médicas, James y Tony me siguen como la sombra. James es supervisor de empleados en la obra y Tony es mi guardaespaldas del día de hoy. Todo esta bien mientras la inspección se va haciendo, pero algo me tiene intranquilo, no se quita ese nudo en la boca del estómago. Antes de continuar con las cosas del día, decido llamar a mi esposa, la cual se supone que este en el hotel o de camino a una reunión. Al tercer timbre contesta y suspiro aliviado al escucharla.

- Hola cielo.

- Hola nena, ¿Estas bien? – le digo

- Si, estaba terminando de repasar el informe de mi reunión, ¿y tú? ¿Qué sucede? – pregunta cuando me quedo callado. – Te siento preocupado.

- Nada, solo tengo un mal presentimiento, no te separes de Valeria hoy ¿De acuerdo?

- John todo estará bien...

- Elena, te amo, solo no te alejes de ella. Eres mi vida.

-No hables como si te estuvieras despidiendo John Holder.

- No lo estoy haciendo mi dulce Lena. Solo necesito que estas y estarás bien. – dije tratando de tranquilizar el enojo que escuche en su voz, el cual yo cause, aunque esta mas tranquilo el nudo en mi estómago, no se ha ido.

-Todo estará bien, prometo que seré una chica buena hoy. – se escuchaba juguetona, picara, algo que no ha estado en su voz en las pasadas semanas.

- Juro que te compensare por ser buena hoy.

- Te veo en el hotel mi amor. – dice – Te amo

- Nos vemos nena, te amo. – algo que nunca le dijimos a Elena, era que Samuel logro localizar una posible dirección de donde estaba Fabio. Cuando registraron el lugar, la policía encontró fotos, muchas fotos de vigilancia, especialmente de Elena y mías. Antes de que colocáramos seguridad.

Hemos estado horas en el edificio revisando documentos, dudas, planos y ya la vista me pesa y el estomago me dice que debo comer, cuando nos vamos dirigiendo para tomar el elevador y bajar a almorzar algo llama mi atención. Me recuerdo que estamos en un piso catorce y que mi duda no puede ser cierta.

- ¿Qué es ese olor? – dice James.

- ¿También lo sientes? – pregunto

- ese olor, es... ¿gasolina? ¿gas?

- Estamos en un piso catorce Tony, es imposible. – Seguimos caminando un poco más, enfocando nuestros olfatos. – Mierda, es gas.

- ¿John? – dice James

- Saquen a todos, puede ser una fuga de gas. – Grite corriendo para avisar a los empleados – Salgan de aquí, por las escaleras...

- ¿Qué? – grito el primer grupo

- Fuga de gas, salgan ... Raymond llama a la seguridad del edificio. – Siento miedo, es un olor muy fuerte y cualquier chispa puede activar un fuego o peor.

Varios pisos hacia abajo había apartamentos, mas oficinas médicas, una cafetería, cualquier cosa puede pasar. Logramos evacuar a todos en el piso y seguridad se estaba encargando de todos los demás pisos, bomberos había sido avisado igual que la policía. Somos los últimos en el piso, vamos bajando rápidos por la escalera de emergencia, pero lo escucho y me detengo de golpe, haciendo que Tony choque con mi espalda.

- ¿Escuchaste eso? – pregunto.

- Vamos – dice cuando escucha el grito de una mujer pidiendo ayuda.

Corremos lo mas que podemos y la voz se escucha mas fuerte cuando entramos a un piso de oficinas que ya habían evacuado. Empezamos a gritar y la mujer nos contesta, seguimos su voz hasta llegar a la puerta de un baño que esta cerrada.

- ¿señora? – grito

- Ayuda por favor.

- Vamos a tumbar la puerta, aléjese de ella – le grita Tony

- Estoy lejos de ella.

- ¿Listo John? – me pregunta.

- Claro – dimos dos fuertes patas a la puerta y esta salió volando hacia adentro, siento una corriente en la pierna que se que mas tarde se transformara en un dolor feo.

- Aquí.

- Aquí estamos. – dice Tony cuando se adelanta lo que yo logro estabilizarme. - ¡oh mierda!

- ¿Qué? – cuando me asomo me asombro, esta en el suelo del cubículo al lado del toilet, y su vientre parece que esta a muy poco tiempo de explotar. – Tenemos que sacarla Tony, ahora.

- ¿Puedes caminar, cariño? – Tony toca su rostro, viendo un poco de sangre seca en la cien.

- No estoy segura, las piernas me tiemblan, hormiguean.

- De acuerdo, sostente de mi cuello. – Veo a Tony cargarla y esta tiembla en sus brazos. – ¿Cómo llegaste aquí?

- No recuerdo, cuando todos empezaron a correr, un sujeto se acerco y dijo que me ayudaría, pero no recuerdo nada más, hasta que me desperté en el suelo. – Nos cuenta mientras caminamos rápidamente para las escaleras.

- ¿Recuerdas su rostro? – pregunto

- No, lo siento. – vemos como se encoge asustada en los brazos de Tony. – Me duele el vientre, creo que son contracciones.

-Ese bebé sabe como ser oportuno – dice Tony tratando de relajarla. – John Adelántate, avisa a los bomberos.

- De acuerdo. – corro bajando las escaleras con la mayor rapidez posible intentabndo no romperme el cuello en el proceso. – Necesito ayuda. – grito cuando salgo por la puerta del primer piso. – Una ambulancia... bebé... bajando – un bombero me ve y trae oxigeno y me lo coloca.

- ¿Esta bien, que pasa?

- Embarazada, bajando... - trato de tomar aire, pero mis pulmones no están acostumbrados.

- Dare aviso, tengo que sacarlo de aquí, señor. – dice tomándome del brazo y arrastrándome a la salida.

- Mi amigo... -

- Dare aviso, venga conmigo. – voy con el viendo como un paramédico recibe la orden de entrar a ayudar a Tony. Este bombero me lleva hasta una ambulancia que esta estacionada en una esquina cerca, el paramédico que me recibe me coloca una mascarilla en la boca cuando el bombero se lleva su oxígeno.

La adrenalina poco a poco deja mi cuerpo

Algo está mal

Estoy perdiendo la fuerza

Mi vista esta borrosa

Una sombre se coloca a mi lado, no puedo identificarla.

-Un placer conocerlos señor Holder

Luego ... oscuridad... mierda

Estoy en problemas

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Espero esten disfrutando esta historia que esta proxima a terminar, a solo unos pocos capitulos mas... 

BESOS DESDE PUERTO RICO 

Una Locura con SuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora