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Decir que estaba bien no era del todo una mentira.
O eso quiso creer cuando se lo dijo a Sasuke al dejarla ir después de acabar su almuerzo.
Tener el estómago lleno sirvió más de lo que quiso admitir. Pero aquella molestia seguía persistiendo después de dos días, si bien el clima era un poco más caluroso que otros días sentía un calor como ninguno, y tener qué ocultar los chupetones de Sasuke no ayudaba con su problema, y sin contar el dolor de vientre y de su entrepierna.
Tal ves se debía a su inexperiencia acerca de esos temas, pero no creía que fuese algo normal. Preguntarle a Hinata no serviría de mucho. Solo terminaría por preocuparla.
Y lo peor de todo es qué aún faltaba media jornada para terminar las clases.Y aún faltaba deporte. No creía poder con eso.
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Fue una suerte que el profesor la dejara estar ausentarse de deporte.
Se recostó en la camilla de la enfermería pensando que haría cuando su tía quisiera ir a visitarla. Estaba segura que se llevaría una sorpresa.
Debería inclusive a buscar un trabajo de medio tiempo, estaba en 2do año de preparatoria y en un abrir de ojos estaría en la Universidad. De alguna manera debería comenzar a ahorrar y pensar a futuro. Era triste pensar que en menos de poco año tanto Sasuke como Naruto e Ino irían a la Universidad. Aunque era bueno saber que aun estaría con Hinata.Sus ojos estaban adormecidos apesar de haber dormido todo el día anterior. Su mente se sentía apagada y somnolienta. Con tantas preocupaciones en mente comenzó a quedarse dormida.
Hay ocasiones en que todavía lo recuerda. Si pone atención, si siente con el corazón aún escucha las olas golpeando la arena, aun siente el viento meciendola y la luz envolviendola en un abrazo cálido.
La persona que se acerca a su lado cambia en algunos sueños, aveces es su madre, acariciándo su cabellera mientras le tararea en silencio, otra veces es Sasuke llamándola. Muy pocas veces es una mujer que no conoce, pero que le dice que todo estará bien.
Los agradables recuerdos ocasionalmente son envueltos por pesadillas. Por platos rotos, gritos y llantos, si es peor aún, los tres juntos.
Se escucha gritar a si misma, pide ayuda, siente que le falta aire y si no es demasiado cruel... aún siente aquellas calientes manos tocarla, abrir su blusa con fuerza y si...Aveces escucha su voz llamándola.
— Sakura.
Abriendo los ojos se encontró con el techo de la enfermería. Su corazón latía con locura y su mente era un caos. De su mejilla se deslizó una lágrima.
Con tristeza pensó que aun después de tanto llorar seguía llorando.
De su celular llegó un mensaje de Hinata buscándola.Con bochorno le pidió verla en los baños con su base de pintura. Aunque aún faltarán dos horas para salir sentía que no podía aguantar un minuto más con aquella blusa de cuello de tortuga. Era una suerte qué los baños se encontrarán vacíos, las chicas deberían estar en esos momentos en las duchas.
Hinata abrió la puerta del baño con una sonrisa. Vestía un cómodo short y una linda blusa blanca qué hacía juego con sus ojos. Su cabe,llo lucia húmedo aún por su ducha en las regaderas.
— ¿Cómo sigues, Sakura?
— Estoy mejor, creo que es por el calor. No aguanto tener esto más tiempo.— Dijo estirando el cuello de la blusa.
— Te traje esto. Esta limpio. Estaba en mi casillero, normalmente guardo una muda ahí por cualquier cosa. — a sus manos le tendió una blusa de manga larga morada de apariencia fresca.
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"Su Manera de Amar"
RomanceLa vida de ambos cambiará al conocerse. Sakura sabe que el amor de Sasuke aveces la lastimo, pero también la curo. Sasuke la ama con posesividad, y comienza a creer que aveces no siempre es bueno.