Los ángeles lloran.
.
.
.
Jamás imagino que el silencio fuese tan reconfortante, la paz y tranquilidad lo mecian dándole un sueño gratificante.
Poco bueno o malo su cuerpo se lleno de dolor, una rajaga de pesadez que circulaban desvaneciendo cualquier calma.— ¿Sasuke?
Escucho su nombre. Alguien parecía llamarlo.
— ¿Esta despertando?
— Eso creo.
Estaba cansado, deseaba poder dormir un poco más. Desapareciendo de la calma las voces comenzaron a escucharse cada vez más y más fuerte.
— ¿Sasuke? Mira que tengo razón. Esta despertando.
Dejando que la luz se filtraran por sus ojos los abrió sintiéndose confundido por no reconocer el sitio en el que se encontraba. Miró a su alrededor encontrando paredes blancas en su totalidad, sintiendo un pinchazo en su muñeca encontró lo que parecía ser una intravenosa conectada a su brazo.
— Hasta que al fin despiertas. — Le dijo Suigetsu sentando aún lado de donde el estaba. — Estaba apunto de marcarle a Itachi.
— ¿Qué? — Sasuke trato de levantarse, confundido acerca del lugar en donde se encontraba.
— No te levántates así, ten más cuidado.— Fue la sorpresa de Sasuke de encontrar a Juugo entrar por la puerta de la habitación con café.
Este compartía el mismo aspecto desalineado que Suigetsu. Lucía la misma ropa que el día anterior, y no sólo eso. Se mostraba cansado y con aparentemente preocupación que pareció desaparecer en cuanto lo vio despierto.
— Es lo que le dije. — Hablo Suigetsu tomando su café.
— Claro que no.— Refutó Sasuke mirandolo fastidiado por sentir un gran mareo al levantarse.
— Bueno, no lo dije pero lo pensé. — Se justifico Suigetsu. — Lo que cuenta es la intención, ¿no?
— Imbecil. — Murmuró Sasuke confundido por la debilidad de su cuerpo.— ¿En donde estoy?
— En el hospital.
— ¿Qué? — Sasuke miro a Juugo mientras con más claridad inspeccionaba la habitación en la que se encontraba.
— Ahora aparte de suicida sordo.— Susurro Suigetsu negando con la cabeza.
— Te escuche, imbecil. — Gruñó Sasuke concentrando su ira en el. — Creo que últimamente he sido muy amable contigo.
— No te tengo miedo, ¿que puedes hacerme en tu condición? — Suigetsu se burló enseñandole la lengua.
— Oh, acércate y lo verás. — Sasuke lo fulmino con la mirada acrecentando una siniestra sonrisa.
— C-claro que no te tengo miedo. — Dijo Suigetsu escondiéndose detrás de Juugo.
— Entonces acércate.— Dijo Sasuke sonriendo con fingida amabilidad.
ESTÁS LEYENDO
"Su Manera de Amar"
RomanceLa vida de ambos cambiará al conocerse. Sakura sabe que el amor de Sasuke aveces la lastimo, pero también la curo. Sasuke la ama con posesividad, y comienza a creer que aveces no siempre es bueno.