En donde Gülbahar dice qué el único hombre al qué ama es a aquel joven del cuál la separaron cuándo los tártaros llegaron a Venecia
O
En donde Gülbahar se da cuenta qué se enamoró del príncipe Selim cuándo ya es demasiado tarde.
— ¡Gülbahar felicidades! Eres una hermosa sultana. — La sultana Hürrem dijo con alegría cuando entro a los aposentos de la joven.
— Gracias mi sultana. — Gülbahar sonrió para después mirar a su pequeño el cuál estaba en sus brazos. — Allah bendito lo proteja siempre.
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La sultana Hürrem asintió con una sonrisa sonrisa, después las puertas fueron abiertas entrando por estás el sultán seguido de su hijo.
— Felicidades Gülbahar, nos has dado un príncipe muy sano. — Habló el sultán.
— Gracias mi sultán. — Gülbahar dio una leve reverencia con su cabeza.
— Iniciaremos la ceremonia de nombramiento. — Entonces el sultán se acercó a la joven tomando al bebé en sus brazos. — Allah es grande, Allah es grande, Allah es grande, Allah bendícelo, Allah cuídalo, Allah protegelo, tú nombre es Mehmed, tú nombre es Mehmed, tú nombre es Mehmed. — El sultán susurró cerca del pequeño.
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— Qué hermoso nombre le ha dado mi majestad. — La joven dijo para después sonreír.
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