Capitulo Nueve: "Tu boca y la mía"

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Anne le había mandado por mensaje de texto el teléfono de Louis a Harry, que inmediatamente agendó. Estuvo todo el día pensando si escribirle o no, y de hacerlo, que decirle.


En la vida hay dos tipos diferentes de persona, le dijo una vez su mamá, los que evitan el dolor, y los que se procuran el placer. Harry era de los primeros, y mandarle un mensaje de texto a Louis implicaba darle la oportunidad de rechazarlo, en cambio si no lo hacía, aún conservaba intacto el recuerdo de aquel beso.


Pero eso no lo dejaba tranquilo, por el contrario, se veía impedido de hacer cualquier otra actividad, de hecho intentó leer y no lo pudo hacer por más de cinco segundos, luego intentó ver una película, pero la sacó porque ni siquiera logró comprender la introducción, bajó a la cocina donde estaba su mamá para charlar con ella, y francamente, solo la veía mover sus labios, pero las palabras sueltas que lograba escuchar no formaban ninguna frase coherente. Finalmente, volvió a su habitación. Era inexplicable la angustia que sentía. Deseaba hablarle, deseaba saber de él, pero tenía tanto miedo de dar el primer paso, que simplemente no lo hizo, y se quedó tendido con el pecho oprimido.


Luego de que se despidiese de Zayn, Louis pensó que sería buena idea visitar a Harry, pero eran como las seis de la tarde, así que decidió hablar con Anne, para preguntarle si no era inoportuna su visita. Si bien era cierto que Louis Tomlinson era un bruto de remate, también lo era, que había sido educado bajo un estricto protocolo de clase alta, por lo que cuando quería ser correcto, detallista y educado, era el mejor de todos.


A la mamá de Harry, le sorprendió la cortesía de la llamada, pero no la intención de ese chico, de querer visitar a su hijo, y por cómo había estado todo el día su bebe, tan angustiado y casi sin comer, no le pareció buena idea negarle la oportunidad de sentirse mejor, así que aceptó que Louis los visite e incluso lo invitó a cenar. Para darle una sorpresa a Harry, no le dijo nada. Cuando llamaron a la puerta, Anne le pidió que abriera, él ni siquiera imaginaba quien estaba del otro lado


-Hola! Saludó Louis en un tono mucho mas alto del que esperaba escuchar de sí mismo


-H..Hola, contestó nervioso Harry.


Desde atrás se escuchó a Anne decirle a Louis –Bienvenido cariño, la cena estará en una hora, mientras tanto pueden charlar en tu habitación Harry.


Que mujer tan encantadora era Anne, pensó Lou, después de lo que hice, me recibe de esta forma. Se imaginó como hubiese sido la reacción de Jay, su madre, y sonrió imaginándola gritar que se fuera inmediatamente de su casa.


Una vez en la habitación de Harry, Louis se acomodó en la silla de cuero, realmente le gustaba mucho ese espacio de lectura, mientras el otro se sentaba en su cama, visiblemente nervioso. Ninguno de los dos dijo palabra alguna por diez minutos, y eso era realmente mucho tiempo, sobre todo cuando uno desea hablar y siente que no encuentra que decir.


Finalmente, Harry dio el primer paso


-¿Cómo estuvo tu día?


-Uh, intenso... estuve con Zayn, corté con mi novia Eleonour y hable con mi peor enemigo.

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