No te detengas

Veintiuno: La reunión

Luego de una larga batalla telefónica Zayn había conseguido que finalmente Cox accediera a encontrarse con él. Había pasado un mes desde su encuentro con el abogado, y todo el proceso le había generado mucha impaciencia, más aún considerando que no podía decirle nada a Louis, quien a estas alturas ya era un fanático rabioso de Cox, al punto de haberse creado un perfil falso y participar en todos y cada uno de los sitios web donde se hablara de él o de su obra. Estaba francamente obsesionado.
Llegó al lugar indicado 15 minutos antes, pero no quiso parecer tan desesperado, así que dio una vuelta a la manzana. Para su sorpresa, el lugar quedaba una cuadra de la cada de Louis. Zayn río por dentro imaginando la cara de su amigo si tan sólo se enterara.
Cuando estuvo nuevamente en el portón de ingreso, no pudo evitar un pequeño temblor al tocar el timbre. A decir verdad Zayn también se había vuelto un fanático furioso de Cox. Tanto que con Louis lideraban con nombres falsos los clubs de fans. No fue difícil explicarle a Louis el porqué compartían esa pasión, después de todo fue el mismo Louis quien lo había introducido en ese mundo.
Una voz femenina muy dulce le decía por el intercomunicador, que era bienvenido y lo invitaba a pasar. La casa tenia un amplio retiro, por lo que debió caminar un tramo hasta llegar a la puerta de entrada. Trató de hacerlo despacio, por las dudas hubiese cámaras de seguridad. No quería verse desesperado... No quería mostrar como realmente se sentía en ese momento. Al llegar, y antes de volver a tocar, le abre la puerta una persona. Le sorprendió verla vestida de guardapolvo blanco, un poco extraño como uniforme para el servicio doméstico.
-buenos días, el Sr. Cox lo atenderá en unos minutos.
-muy bien, muchas gracias.
-lo acompañó a la biblioteca, ahí podrá esperarlo más cómodo. Desea beber algo?
-agua estaría bien para mí. -Zayn estaba tan nervioso que tenía la boca seca
La sra. toma un handy e indica que lleven agua a la biblioteca. Una moderna forma de comunicarse entre ellos, pensó. Luego, le indica con la mano a Zayn que la acompañe. La biblioteca era enorme y luminosa. Tenía estanterías de pudo a techo llenas de libros. La decoración era clásica. Mucha madera, un sofá de cuero marrón con una mesita al lado y una enorme lámpara. Al fondo un escritorio antiguo, sin silla, eso le resultó extraño.
En realidad lo más extraño sucedió inmediatamente. La sra. Previo invitarlo a que se sentara le dijo
-me gustaría decirle que el Sr. se encuentra un poco nervioso por esta reunión. Es la primera vez que debe hacerlo por su cuenta y no están sus padres para darle su apoyo. Le suplico que no use la vehemencia que utilizó para conseguir esta entrevista con él, porque últimamente ha estado muy desanimado y eso podría hacerlo retroceder en... Ud. Mismo, luego de verlo, comprenderá...
Zayn sentía que su corazón iba a escapar de su pecho. Esa persona no era empleada doméstica? Sólo pudo prometer a media voz, que sería amable .
Ella se retiró e inmediatamente ingresó otra mujer, vestida con uniforme de servicio doméstico con una bandeja. Traía una jarra con agua helada y una copa. Apoyo todo en el escritorio y le dio el vaso lleno de agua a zayn., para luego marcharse.
Pasaron 15 minutos hasta que escucho abrirse la puerta. Finalmente conocería a Cox. Para su sorpresa la primera sra empujaba una silla de ruedas. Sentado en ella, asumió estaba Cox.
Zayn rápidamente se apresuró a pararse y se dirigió hacia él. Pero no lo esperaba, no estaba preparado para verlo. Ahí estaba, sentado en una pose indefensa, la persona menos pensada.
Sólo pudo decir su nombre, sólo fue un suspiro...
-Harry.