Polos opuestos (AlfaxAlfa)

Confrontación

Kenneth estaba conmocionado, no podía creer lo que escuchaba, el bebé en la panza de Leo no era de él.

-No, no puede ser, estas mintiendo- grito Leo.

-El no miente Leo, acéptalo ya, dime cuantas veces te burlaste de mí, del amor que tanto te mostraba- pregunto Kenneth, algo alterado.

-No es así Ken, te juro que nunca te engañe- le respondió Leo.

-Entonces como explicas a ese bebé- le cuestiono.

-No fue intencional, no pensé que quedará embarazado, fue un error- termino aceptando Leo.

-Comunícate con tu error, hazlo responsable de ti y ese pequeño- le dijo Kenneth –Vamos Law, tengo ganas de beber un poco- le dijo al pequeño alfa, quien de manera obediente lo siguió, pero antes de salir de la sala, le entrego la prueba a Leo.

-Espero encuentres al papá de tu bebé- le dejo los papeles de la prueba a un lado, cerró la puerta tras él. Law le pregunto a Kenneth donde irían a beber para encontrarse ahí ya que ambos venían en su carro. Pero antes de que salieran del laboratorio, Leo salió de la sala corriendo tras Kenneth.

-Ken, espera, por favor no te vayas- le grito, por sus ojos salían lágrimas.

-Ahora que quieres- le pregunto Law. Leo volteo a verlo, ya nada quedaba de aquel omega hermoso que Law había visto en el celular de Kenneth.

-Eres todo lo que me queda Ken, por favor, no me abandones- le suplico Leo.

-Con qué derecho me pides eso, sabes lo que sentí cuando leí tu mensaje, no puedes pedirme eso, ya no- le contesto Kenneth en un tono molesto.

-Por favor, Ken- dijo Leo liberando feromonas seductoras. Esta acción enfureció a Law, éste tomo del brazo a Kenneth y lo atrajo hacia él.

-Como te atreves- le dijo Law a Leo mientras se interponía entre los dos –como puedes pedirle ayuda a alguien a quien lastimaste, no solo lo dejaste por otro, sino que también lo engañabas, ya déjanos en paz, y ve en busca del papá de tu hijo, es lo que debes hacer- le termino de decir.

-Tu igual le harás lo mismo, crees que nunca encontraras a tu paraje destinada, cuando eso pase lo abandonaras y todo el amor que ahorita le demuestras quedara en el olvido- le contesto.

Law no dijo nada, miro a Leo y negó con la cabeza –ya hay que irnos- le dijo a Kenneth. Éste asintió con la cabeza, salieron del laboratorio dejando a Leo adentro. Law acompaño a Kenneth hasta su auto al verlo marchar, se regresó al laboratorio donde seguía Leo. Estaba muy enojado que sentía que las feromonas se iban a descontrolar. Al entrar vio a Leo llorando, se acercó y le dio un fajo de dinero.

-Ve por tus cosas a la casa de Kenny, el resto utilízalo para que sobrevivas- le dijo Law –no vuelvas a buscarlo, ni se te ocurra aparecer de nuevo frente a él, sólo porque estas embarazado y el bebé no tiene la culpa de nada porque si no- no termino de decir porque lo interrumpió Leo

-Me estas amenazando, el niño me amenaza- canturreo Leo, las lágrimas habían cesado

-No es una amenaza, es una advertencia Leo, si haces algo que vuelva a lastimar a Kenny, nada más recuerda que no querrás tenerme como enemigo- termino de decir, saco otro fajo de dinero, se lo lanzo y salió del laboratorio.

Una vez en su carro, trato de calmarse, pues Kenneth lo estaba esperando en el bar. Después de unos minutos llegó al lugar acordado.

-Ya llegué Kenny, no me digas que iniciaste sin mí- dijo Law en su tono usual de voz mientras se acercaba a la mesa de Kenneth.

-Pues tardaste en llegar- le contesto.

-Un pobre animalito me distrajo, pero ya está todo resuelto- sonrió, se sentó a lado de Kenneth –tú me debes algo Kenny, no se me ha olvidado- le dijo para después ordenar una cerveza.

Lo dicho tomo por sorpresa a Kenneth, pensó que al pequeño alfa se le había olvidado aquello con todo lo que había pasado, pero estaba equivocado.

-Que es aquello que te debo- le pregunto mirándolo directamente a los ojos, quería mostrar que él también podía jugar –dime que es lo que te debo- volvió a repetir, con una sonrisa.

-Me debes un beso- le contesto Law, al hacerlo Kenneth se sonrojo y bebió de su vaso.

-No recuerdo haberte prometido un beso o algo por el estilo, no entiendo porque dices que te lo debo- le respondió, Law soltó una carcajada.

-Olvídalo- le respondió.

Durante la velada hablaron de varios temas triviales, igual hablaron del trabajo, Kenneth elogiaba todo lo que Law había logrado en tan temprana edad. Los colores se le fueron subiendo a Kenneth, esto fue la señal de que deberían irse.

-Te llevare a tu casa- le dijo Law a Kenneth.

-Iré sólo, aparte que harás con tu carro, no lo puedes dejar aquí- le replico

-lo sé por eso lo deje en mi casa antes de venir, vamos regresemos en tu carro- le contesto, se levantó de su asiento, ayudo a Kenneth a levantarse, se dirigieron al estacionamiento, al llegar al auto Law ayuda a Kenneth a subir. Cuando dejo a Kenneth en el asiento del copiloto, saco su teléfono e hizo una llamada.

-Hola querido amigo, Hazme un favor, puedes venir a buscar mi carro, te mando la dirección por mensaje- termino la llamada, sin esperar respuesta de su amigo, de prisa subió al asiento del conductor.

El camino de regreso fue silencioso, Kenneth miraba la ventana, Law iba concentrado manejando.

-Por qué no aceleras un poquito, vas muy lento- comento Kenneth sin voltear a ver al conductor –sabes este carro puede alcanzar grandes velocidades- finalizo.

-No sabía que te gustaba la velocidad- respondió Law, pisando el acelerador.

-Me tranquiliza, sabes estos últimos días sentía que iba a mil kilómetros por hora, pero ahora siento que voy a diez kilometro por hora, por primera vez en meses me siento en calma, el que Leo haya llegado con su revuelo, me hizo bien, siento que me quite el sentimiento oscuro que me quedo después de la ruptura, en pocas palabras me siento muy bien- finalizo.

- ¿estás listo para comenzar de nuevo? - pregunto, con la vista en la carretera.

- Sí – volteo a ver a su conductor.

- Me das permiso para avanzar- volvió a preguntar.

- Sí – Le respondió.

Una sonrisa se le dibujo en el rostro a Law –Bien- finalizo, acelero un poco más.