Eras celeste y ahora sos verde, verde oscuro,
verde enfermizo. Sos un verde que me marea
y me hace vomitar. Un verde que solía ser el
celeste más complementario de mi naranja.
Y ahora solo sos opaco y frio.Dejaste de ser agua, una ola del mar, una lluvia
de domingo, un rocío por la mañana, dejaste
de serlo. Ahora sos pasto seco que debe ser
cortado, sos un jardín con recuerdos que
demoler, una esmeralda, un diamante que
debe ser confiscado y puesto en un museo,
lejos donde no pueda verlo, donde no duela,
donde no me vea reflejada en las paredes de
tu cristal.lejos donde tu verde descompuesto,
deje de incitar el rojo interno de
mi naranja descompuesto.—PRI