ODIO ARDIENTE, historia de un matrimonio [Alastor x tú] Libro 2

TÚ, MI REFLEJO

Hola, solo para decir que los amo, gracias por leer y que adoro mucho sus comentarios.

Sin más, disfruten este episodio con la joya musical que les dejo.

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Pensé que ahora que estaba muerto, cosas como el frío o el hambre ya no serían razón de preocupación para mí, pero al final descubrí que el morir y llegar al infierno es como mudarte del pueblo a la ciudad, lo único que cambia es el sistema de ley, pero el mundo sigue exactamente igual, la única diferencia es que en el infierno nadie se molesta en simular ser un ciudadano respetuoso de la ley, puesto que no hay algo como eso, bueno, si existe una:

Mata o muere.

Pero en fin, a lo que quiero llegar es que por primera vez en décadas tengo un frío de la jodida, eso se debe a la repentina visita del espíritu del invierno que ha venido a congelarte el culo. A pesar de ese frío infernal, estoy corriendo como idiota por el castillo porque por alguna razón todos terminaron siendo paletas de hielo, y por alguna razón yo no, pero eso no quita que me preocupe por la única mujer que he amado en mi vida.

Entonces una respiración igual de acelerada que la mía choca repentinamente conmigo, el golpe con lo que sea que me tope me tiro al piso, dando como resultado que termine temblando un poco de frio por la temperatura del mármol, la cual seguramente está bajo cero. Cuando levanto mi mirada la veo, es ella, me mira fijamente con sorpresa y algo más que no logro descifrar en su rostro aparentemente inexpresivo.

—Estas... vivo—su voz parecía paralizada, como si algo en la garganta le obstruyera hablar.

—Lo estoy—me levanté del suelo y ella hizo lo mismo, se veía cansada, pude notar como sus manos se llenaron de algo parecido a runas, me acerque a ella cuando note que podría caerse, es casi como si la adrenalina ya viera pasado.

—Alastor...—Algo en su mirada muerta me recordó a aquel día. El día en que me dejo para casarse con otro tenía esa misma mirada, en su momento no supe descifrarla, pero ahora para mí es fácil decodificar lo que quiere decirme: Hay tanto detrás de mis acciones, pero no puedo decirte nada.

—No hace falta que expliques tus acciones—Ella abrió un poco más los ojos demostrando sorpresa—Se bien lo que hay aquí—apunte a su corazón—congelado o no, aún late y siente, sea odio, amor o nada, tu corazón siempre latirá al compás del mío—La dama de hielo frente a mí se enrojeció ligeramente, hace tanto que no veía sus mejillas pintadas de carmín— O mejor dicho, mi corazón siempre latirá al compás del tuyo, aun si ya no sientes nada por mí, yo seré el espejo en el que reflejes tu alma—Sus ojos se llenaron de lágrimas, ella recuerda estas palabras, pues no es la primera vez que se las digo.

Solo por un instante puedo ver en su mirada la misma vulnerabilidad con la que la encuentre aquel día en el bosque, ella estaba temblando de frio en medio de la noche, su cuerpo magullado y sangrante llego a su límite, finalmente la maldición pudo con ella. Recuerdo que esa noche estaba tirada a un lado de donde está mi tumba, llorando en silencio, abrazando sus rodillas.

Estaba muriendo.

Me acerqué aun pensando que ella me alejaría.

Pero cuando te lanzaste a mis brazos buscando mi afecto pude saberlo.

Pude confirmarlo.

Y aquella noche, cuando escuche sus sollozos descontrolados después de nuestra conversación, pude volverlo a entender, aunque esta vez reflexione acerca de mi propio comportamiento.

Todos estos años me han hecho madurar y comprender que si ella quiere mantenerme lejos aunque me ama, yo se lo permitiré, me basta con verla de lejos. Es suficiente con saber que ella aún me ama en algún lugar, aun si me aleja, aun si me lastima, yo se bien que no soy el único que sufre con nuestra distancia.

Pero estaré ahí el día que ella quiera volver a abrazarme.

Me acerco aún más, sintiendo su poder celestial cerca de mí, la miro fijamente deseando solo tocarla, pero me quedo quieto deseando que ella quiera cerrar la distancia entre nosotros. Ella se seca las lágrimas y se da la vuelta para irse lejos de mí. Me obligo a no ir tras ella, pero entonces ella voltea hacia atrás, apenas por encima de su hombro.

Miraste atrás.

Es todo lo que me darás y es todo lo que puedo pedirte.

Te sigo, dirigiéndonos a esa sala donde puedo escuchar los sollozos de Charlie, me preparo para seguir esta obra de teatro que tú misma has montado, sigo fielmente tus silenciosas indicaciones, me convierto en el esposo de la princesa del infierno y tú en la gobernante del décimo círculo.

Una puesta en escena.

Antes fingíamos ser un matrimonio feliz y ahora fingimos ser desconocidos.

Pasamos de ser idiotas que debían aceptar su amor a ser idiotas que deben negarlo. 

Me acerqué abrazar a mi esposa falsa mientras mi esposa solo debía callar.

En medio de este infierno congelado, nuestro amor es un fantasma más de los sentimientos que se quedaron atrapados en nuestros cadáveres humanos. ¿En qué nos convertimos? Solo en dos almas con diferentes caminos, destinados a amarse y a odiarse al mismo tiempo.

Un amor tan gélido.

Un odio tan ardiente,

Te amo demasiado como para matarte.

Te odio demasiado como para besarte.

Mire como trabajabas con Lucifer mientras la niña de cabello rosado me miraba fijamente, la mire también, por primera vez con verdadero interés, siempre supe que T/N tenía un gusto por los niños, por ello creí que esa niña solo era una más a la que adopto, pero ahora tengo curiosidad por ella.

Ella me dio una ligera sonrisa.

Fue como si algo me golpeara.

Vi a T/N de joven en ella, rápidamente parpadeo esperando dejar de ver el parecido, pero al mirarla nuevamente me encuentre con algo peor, pues...

Me vi a mí mismo.

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En fin, espero les gustara el capítulo de hoy, este capítulo será de mis favoritos, sin duda.

Deberían pasarse a ver la traducción de la canción que les deje para este capítulo, me atrevo a decir que esta canción describe mucho el sentir de ambos durante todo el trayecto de este libro, la encontré por accidente al escribir este capítulo y fue como caída del cielo porque me ayudo a ilustrar los sentimientos de Alastor en este capítulo a la perfección.

Tanto así que la poesía fluyo sola.

Bueno, me despido no sin antes mencionarles que adoro sus comentarios, así que no duden en comentar, me hacen el día sin dudas.

La canción de este capítulo es Dark Paradise de Lana del Rey.