capitulo 9

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Isabella

Vuelvo a sentir esos besos. Mi ángel volví.
Son los besos más dulces y lleno de amor.

Quiero que mi ángel me llevé al cielo .
Quiero perderme en esos besos.
Que nunca se vallan de mi boca, me dan vida con ellos.
Los necesitó para vivir.

Me desperté, aturdida. ¿Donde estaba?
¿Que paso? ¿Mi bebé dónde está?

Mi miedo se había cumplido. No pude salvar lo único bueno que tuve en mi.

Todo terminaba muerto a mi alrededor. Destruía todo lo mas queria

No podía dejar de llorar. ¡Quería morir !Ya estaba muerta.
Sin ella no sería nadie más, una más en un mundo sin color.

Negro como mi vida.

-Hola ¿Cómo te encuentras?- me saluda una doctora entrando en mi habitación.
Cuando me ve se acerca a mi lado para poder darme la noticia seguro. Afirmar mis pensamientos.

-¿Que pasa, porque lloras?- Estaba asustada .

-Mi bebé ¿Dónde está? Ella ¿está... ?-.
No podía ni siquiera decirlo, no quería afrontar esa realidad si era verdad.

- ¡Tranquila mami, ella está bien! .- sus palabras me daban fuerza.

-Cuando termine de revisarte le pediré a la enfermera que te lleve con ella. -

Mi mundo volvía a tener una razón solo fue una pesadilla. Una mala jugada de mi cabeza.

Mi ángel no mintió el me cuido.

Mi ángel que bello sueño. Era muy real.
Tenía todavía su sabor en mi boca.
Qué sueño más placentero.

-¿Que me paso doctora?- quería saber por estaba haciendo allí.

- Tuviste una cesárea de urgencia. Gracias al doctor Alvarez que te atendió rápido, están bien las dos. -

-¿Ahora estoy bien?.- yo lo trate mal y me salvo. Bueno nos salvo a las dos. Quiero verla ya.

-Te voy hacer unos estudios y te digo- Me llevo toda la mañana los estudios . Querían revisarme bien tenían órdenes de no dejar de hacerme ningun estudios. .

Según la información que le saque a la enfermera el doctor Alvarez dejó esa orden.

No veía la hora de terminar para conocer a mi niña.

La llevé nueve meses dentro mio imaginando su cara. Su ojos ¿de qué color serían?¿A quién se parecería a mí o a él?

Sólo pensar que pensar que puede tener algo de él, mejor dicho de unos de ellos. No de el.

Ella era mía. Y de nadie más.

Yo le daría todo hasta mi vida. Una y mil veces más.

No dejaría que ninguno se acercara a ella. primero mató a uno.

Pablo

Todo el camino fui pensando en esos besos. Besos robados. Cualquiera que me viera pensaría que soy un pervertido.
Acosando a una paciente, que no sólo está inconsciente que también es una niña de 18 años.
Sus besos eran muy ricos. Quería ser dueño de ellos. Sólo que sean míos y de nadie más.

Llegando a mi departamento.
Entrando me encontré con una mesa todo puesta.
Una cena para dos.
Melisa había preparado todo. Era muy detallista en las cosas.
Los platos, copas para compartir un buen vino.

Todo una cena para dos personas enamoradas. Pero yo no lo estaba.

No sabía ¿cómo lo tomaría.? No se como le diría que no quería usarla más.

No podía quererla . No pude antes.

Ahora quería querer a mi niña. Quería Isabella. A mi pequeña. Sonaba demasiado demente pero era o que me estaba pasando y lo quería. Quería que pudiera pasar eso.

- hola hermoso- me saluda cuando me ve que estoy entrando.

- Hola Melissa¿como estas? -

Podría decirle esto sin lastimarla. Lo nuestro era sólo sexo.
Pero sabía que ella me quería, respetaba mi dolor por no querer estar con otra mujer. En una relación .
Mi instinto de saciar mi deseos por el buen sexo. Lo así con ella, qué mejor que una amiga a una desconocida.

-¿Cómo está tu paciencia? Que robó tu descanso .- soltó en ese tono irónico cuando algo no le gustaba

-Bien, está estable.- creo que mi sonrisa partiría mi cara.

-Melisa tenemos que hablar- Quería decirle antes que pase más tiempo.

-shhhh no digas nada.-Dice acercándose a mi. Antes que puede decir algo ya estaba besándome. Devorando mi boca.

No podía negar que era una mujer muy sexy . En la cama la pasamos muy bien.

- Perdoname No puedo- sacándola de mis brazos.

- ¡no quiero tener sexo! Hoy no -

- ¿Sexo?. Eso tenemos, pensé que lo nuestro era algo más que Sexo- lo dijo enojada.

Cuando iba a contestar volvió hablar
- NO sabia que era solo eso. Sabes que me mejor me voy. No entiendo tu necesidad de pedirme que venga y después me rechazas ve que yo voy después. Mejor aclara tu cabeza. -
Estaba enojada y era mi culpa. No quería usarla más.

- Sabes que no pienso eso. Eres mas que sexo. - claro que no era solo sexo pero niñera lo que ella quería.

- ok si soy más que sexo demuéstramelo, dame un lugar en tu vida. - sabía que ella quería algo más.

-Sabes que no puedo- la verdad no con ella.

- ¿No puedo o no quieres? - no la quería a ella para eso. Darle una oportunidad seria darle una esperanza a poder amarla.

-¿ Porque no puedes?. ¡Olvidala a Martha!. Ella te dejó por uno con plata. Y tu le lloras- pensaba que era Marta mi motivo.

-No es por ella. No quiero arruinar nuestra amistad -

- Tarde porque yo quiero ser alguien mas que tu amiga. - sabía que pasaría ésto.

-Mira Pablo mejor me voy y el lunes no vemos . - tomaba sus cosas.

-Mely, solo entiendeme -La iba a perder como amiga y no quería.

Solo juntó sus cosas y se fue. No quería lastimarla . Martha la había hecho conmigo no podría ser igual a ella.






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