TAIJU

814 84 9
                                    

-Sus espadas serán entregadas dentro de unos días, ahora pueden regresar a sus hogares- la chica de cabello negro hablo.

Todos ya estaban un poco mejor, pero para Takemichi era aún muy triste que de quinientos participantes solo once regresaran con vida, sus pensamientos fueron interrumpidos por el graznar de los cuervos que se posaron en los hombros de todos, menos en Zenitsu, pues el ave que se posó en él era un pichón que comenzó a picotearlo.

-Aaaah! Michi ayuda, me está picoteando- dijo Zenitsu mientras intentaba quitarse de encima al pájaro.

-Me lo puedo comer?- pregunto Inosuke.

-Chicos, calma, no creo que quiera hacerte daño y tú no te lo puedes comer- dijo Takemichi a ambos chicos.

-Esos son sus pájaros mensajeros, ellos les avisarán cuando tengan una misión- la chica de pelo blanco hablo -Por ahora nos retiramos- ambas jóvenes hicieron una reverencia y se fueron del lugar, seguido de esto los cuervos se fueron volando.

-Supongo que a hora nos separaremos- Takemichi hablo con tristeza mirando a los dos jóvenes.

-No creo que sea necesario- una voz hablo antes que Inosuke y Zenitsu -Le doy permiso a Zenitsu de ir contigo, a demás el joven Inozuke no tiene a donde ir-.

-Abuelo... que hace usted a aquí?!- Zenitsu hablo con sorpresa.

-Bine a ver a mi nieto y a sus amigos... también a asegurarme de que sigas con vida niño tonto-.

Zenitsu comenzó a derramar lágrimas, nadie en toda su vida se había preocupado tanto por él, hasta que conoció al abuelo Sano, sin duda quería hacerlo sentir orgulloso, no puedo evitar lanzarse a él y abrazarlo-Abuelooooo...!!!-.

-Ya mocoso... donde están Izana y los otros tres?-

-Abuelo Sano- Takemichi finalmente hablo -Izana- san y los otros fueron llevados a que trataran sus heridas-.

-HA, pero si eres el joven Takemichi, ya me preguntaba por qué no habías ido al dojo... Mikey y los demás te han estado buscando-.

-Buscando?... porque me estarían buscando, no lo entiendo- Takemichi le respondió.

-Aún son jóvenes, los jóvenes cometen errores, algunos los ignoran y otros deciden enfrentarlos, joven Takemichi... será tu decisión si quieres ayudarlos a remediar su error o dejarlos con esa culpa- el abuelo Sano se separaba del abrazo de Zenitsu para comenzar a caminar -Fue agradable verte con vida héroe llorón, voy a buscar a mis muchachos y tu Zenitsu... ven visitarme al dojo- el abuelo termino de hablar.

Takemichi estaba sumergido en sus pensamientos, acaso los chicos querían pedirle perdón, tenían el derecho siquiera de verle la cara para pedirle perdón, aunque juro no guardarles rencor, aún era muy pronto para verles la cara.

-Gracias abuelo, y claro que iré a visitarlo!!!- Zenitsu le gritaba al abuelo que ya estaba a una gran distancia de ellos -Y bueno Michi adonde vamos- pregunto a Takemichi interrumpiendo su pensar.

-HA, que alegría que no nos separemos, pero tengo que ir a un lugar antes de regresar a casa- Takemichi hablo para no seguir con esos pensamientos negativos, pero no era mentira que estaba feliz de ir a sus misiones con Zenitsu e Inosuke.

-Hablas del demonio que convive contigo?- después de un largo rato en silencio, Inosuke finalmente hablo -su existencia está impregnada en ti-.

-Inosuke sí que eres genial- Takemichi le respondió con asombro.

-Que!?- Zenitsu grito -Se supone que debes matar a los demonios, no vivir con ellos-.

-Bueno, verán... digamos que es mi hermano "mayor", quiero que él regrese a su vida humana, por eso estoy más determinado en detener a Muzan-.

LA  PANDILLA DE LOS CAZADORES Donde viven las historias. Descúbrelo ahora