My little girl - Vettel!

1.8

Estaba exhausto, el día se había vuelto tedioso una vez que tuve que lidiar con la prensa y sus estúpidas preguntas, con todo y eso, en mi mente todavía vislumbraba la sonrisa de mi princesa, llevaba casi un mes sin verla, únicamente hemos hablado por mensaje, pero no me era suficiente, necesitaba ver sus bellos orbes, tomarla entre mis brazos y abrazarla el tiempo suficiente como para que mi fragancia quede impregnada en su cuerpo.

Me pesaba no poder darle un beso de buenas noches, no poder estar ahí para llevarla a comer y darle flores o verla usar alguna de mis camisas, tomar su mano y caminar por las frías calles de Alemania, claro intentando mantener un perfil bajo.

Escuchar su contagiosa risa e intentar mantener un hilo en la conversación, esconder mi cara en su cuello y dejar una que otra marca solo para verla arrugar su nariz mientras idea una nueva excusa o alguna solución.

Ir a la cocina para preparar algo de comer mientras torpemente intenta bajar algo de las repisas, probar sin parar sus labios sabor frutos rojos y ver películas de categoría infantil.

Contar cada una de sus pecas y desnudar su cuerpo, tomar su cintura para poder acercarla hacia mí, acariciar su cabello castaño y recorrer su cuerpo con mis dedos, acallar sus gemidos con besos y aún envueltos en sábanas recuperando el aliento hablar sobre alguna pintura de Van Gogh.

Aprendiendo cada una de sus expresiones para saber como esta y estando perdido en ella olvidar lo que me está contando. Juegos de mesa hasta tarde, enojada porque perdió y golpeando con suavidad mi hombro, casi que imitando una rabieta. 

Subir al coche y simplemente manejar sin dirección, tratando de memorizar la letra de sus canciones favoritas, hacer una parada en algún restaurante de comida rápida o comprar un helado, quizá detenernos en algún supermercado y escoger una botella de vino o champagne, ir a un autocine y burlarnos del otro mientras encontrábamos el modo de acurrucarnos.

Verla jalar mi mano para guiarme hacia la lluvia, chapoteando con el agua en el pavimento, sonriendo genuinamente cuando me acerco a besar sus labios.

Oírla bufar por la frustración al no encontrar las llaves que le había dado a guardar, planear viajes por todo el mundo, sus ojos brillando al contarme sobre cuánto anhelaba ver a su padre mejor para poder salir a explorar el mundo.

La sonrisa que se formaba en su rostro cuando Mick la abrazaba y la atención que prestaba a las prácticas de su hermano, desprendiendo orgullo al saber que estaba haciendo las cosas.

Había memorizado cada pequeño detalle de ella, que hasta cierto punto me causa escalofrío pensar en cuan enamorado estaba.

Esta vez no iba a perderla, haría hasta lo imposible.

Y si bien en mi aún habitaba el miedo, estaba dispuesta a afrontarlo si la recompensa era quedarme a su lado.

Mi meta ya no era pasar la historia, mi nueva meta era dejar mi huella en su corazón.

Al carajo todo, si esta aventura duraba un año o toda una vida, estaba dispuesto a darlo todo.

Sabiendo que era un arma doble filo, pero ya no me importaba mucho, después de todo eramos novios.

Tomé mi celular y abrí la galería, encontrándome con una foto que ella misma había tomado, sonreí dejando escurrir una pequeña lagrima.

Realmente la amaba.

Me recosté en el sillón, dejé el teléfono en mi pecho y cerré los ojos.

¿De verdad tendremos nuestro final feliz?

Sí ambos estaban dispuestos a amarse, ¿por qué seguía una tormenta azotando en lo profundo?

¿Qué? ¿En serio todo sería así de sencillo?

Todo iba de maravilla, pero seguían habiendo más preguntas que respuestas y si bien ambos amaban las rosas olvidaron las espinas.

Tal vez y solo tal vez, este era el principio del fin.

"El amor lo puede todo" ¿no?

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ᴹʸ ᴮᴱᴸᴼⱽᴱᴰ