ERAS MI MUNDO

VESTIDO

-Anda hijo di que lo harás - la señora Jeon suplicó al diseñador.

-Lo haré con una condición - dijo el muy molesto Park, sin dejar de mirar con detenimiento a la chica.

Era increíble que esa sofisticada francesa fuera la futura esposa de su amor pasado, y que se estuviera acostando con su mejor amigo y se comportara como una cualquiera.

Pero ¿Quién era el para juzgar? Todo parecía indicar que Jungkook experimentaría ser engañado. Y esperaba verlo actuar como un salvaje como se portó con el.

Tocó levemente la cicatriz de su labio y observó cada detalle de esa mujer.

-Lo que tu digas corazón, dime ¿CUAL es tu condición.? - la señora Jeon preguntó intrigada.

-Muy simple - dijo el diseñador frotando sus labios - Deben venir ambos a pedírmelo.

-¿Ambos? - la señora Jeon se sorprendió.

-Si ambos, la pareja. - explico el castaño - Mi inspiración viene del amor señora. El año pasado hice el vestido de....

-Lo se, he investigado tu trabajo, he pedido opiniones y vi en persona ese vestido. Es la cosa más esplendorosa qué vi jamás. - ella le dijo como en transe recordando aquel vestido.

-Así de esplendoroso es su amor, el siempre la protegió, la cuido y pregonó por lo alto su amor. Ellos son una pareja hecha por dios. Se aman y crean amor a su alrededor. - Park explicó a las mujeres - la joyería fue espectacular...

-Hiciste también la joyería - la envidiosa señora Jeon reclamo un poco.

-Hice todo lo que ella llevaba encima ese día, desde los zapatos hasta la lencería - respondió el orgulloso Jimin - pago mucho más de lo que usted me dio aquel día.

-Querido de haber sabido de tu talento, no te dejo ir nunca - ella dijo hipócritamente.

-Debo ver la pareja primero - respondió ignorando el comentario de la mujer - después decidiré.

-Le diré a mi hijo que venga a verte - ella respondió.

-No me esta entendiendo - dijo re soplando el castaño - deben venir ambos si tanto quieren su vestido...

-Vendremos, no te preocupes - la mujer insistió.

-Sigue sin entenderme, - Jimin dijo ya estresado - deben venir ambos, Jungkook y la ¿señorita?....

-Camille, - dijo con falsa timidez, - mi nombre es Camille.

-Ellos dos, - respondió el diseñador - Necesito ver a la feliz pareja y saber si me inspiran algo, pero no prometo nada.

-Jimin corazón - la mujer también fingía querer a ese chico. - Es solo un vestido. No deberías poner tantas trabas.

-Lo toma o lo deja, hay muchos diseñadores también - fue su última palabra.

-Esta bien, mañana vendremos - la señora Jeon insistió - No te dejaré ir.

-Y otra cosa - Jimin detuvo a las mujeres que ya caminaban a la salida - Necesito que programen la cita. No puede estar sucediendo esto. Mi hija Me espera y no tenía en mi agenda hablar con ustedes. Si amenazan con no irse hasta que las atienda. Aquí se quedarán hasta el día siguiente.

La mujer solo torció la boca, y camino a la salida dando grandes zancadas sin esperar a la fingida dulce Camille.

-Este estúpido que se cree - Gritó cuando ya estaban en la calle - por que tenía que ser precisamente el.

-Madre no entiendo - ella comentó.

-Es un viejo conocido - ella respondió - Pero por lo que veo me odia, aunque debía agradecerme qué está vivo.