HELENA

Cap. 29

Por primera vez en mucho tiempo no me sentía tan avergonzada como el día de hoy. El Doctor Min me llevaba a casa... había insistido en acompañarnos. Dijo que Papá estaba demasiado molesto y lo correcto era ir con nosotros ya que Mamá se lo había pedido cómo un favor personal. Al inicio me negué rotundamente. No estoy acostumbrada a que un adulto sea responsable de mí. Mis Padres sólo han sido económicamente presentes y con eso debía bastar, no debía pedir más... yo debía entender que el precio a la estabilidad económica que teníamos era la soledad y de pronto llega a mi vida este par de personitas que me empujan a salir de esa zona tan solitaria en la que he crecido para recordarme que no está bien ser obligado a vivir así... a recordarme que una persona que te ama estará para ti presente, creando momentos felices... acompañándote a enfrentar tus monstruos.
El Doctor Min sonreía mientras bebía su té Da Hong Pao el cuál me contó es de china y lo costoso que es, dijo que un paciente de la clínica es fabricante y cada mes le envía para su consumo como agradecimiento.

A pesar de que el Doctor Min se comportaba cómo si nada ubiese sucedido. Me sentía faltal... demasiado avergonzada de que tuviese que traerme a casa con Papá que es un violento y con la vergüenza de que sabe que pasé la noche con su hijo.

No paraba de sentirme abochornada con Yoongi sosteniendo mi mano acariciando el dorso de esta, besando de vez en cuándo frente a su Padre y yo... yo sólo quería cubrir mi rostro con una bolsa de papel.

Pronto nos encontrabamos a las afueras de mi hogar. YooRa no dudo ni un segundo en permitirnos la entrada en cuánto me vio para recibirme con esa bonita sonrisa.
Ella bajó mi equipaje y mi bolso de mano.
Yoongi ajustó las mancuernas de su bonita camisa y sonrió al ver a YooRa.

-------¡Buen día señorita YooRa!.
-------¡Joven Min! ¡Buen día!. Les miré sospechosa... ¿de dónde tanta confianza?
-------Le recomiendo cubrir con su pelito esta parte de aquí. Yoora acomodó mi cabello cuidadosamente cubriendo uno de los moretes que tenía en el cuello encendiendo mis mejillas cómo horno.
--------¡Entremos mis niños!. El Doctor Min sonrió ampliamente y colocó sus abrazos en nuestros hombros empujandonos a caminar hacia la puerta de mi hogar.-------Muy bien Yoongi... sabes que te cubro la espalda ¿cierto? Pero sin importar lo que suceda allá dentro recuerda que son los Padres de tu novia y sobre todo adultos y debes ser respetuoso... esa es la educación que te he dado ¿verdad?.

El Doctor Min es un gran Padre. No pude evitar sentir una leve caricia de bondad en sus palabras... me hicieron sentir más segura de la decisión que había tomado al enamorarme de su hijo.

-------¿verdad?. Volvió a preguntar insistente captando mi atención antes de que YooRa abriera esa enorme puerta de sequoia.

--------Si ellos no tienen la razón no voy a quedarme de brazos cruzados así que ahórrate tú manipulación Min, serán adultos y Padres de Helena pero si ellos dicen o hacen algo que la lastime... ¡no me voy a quedar de brazos cruzados!.

Su voz adormilada y desganada susurraron lo obvio para Él. Yoongi iba a defenderme sin importar qué.

--------¡No dejas de sorprenderme muchacho!.
La risilla del Señor Min estaba cargada de orgullo y tranquilidad.

Entramos al salón principal y cordial les invité a pasar a lo que YooRa amable fue a buscar bocadillos y té. Pasé mis manos por mis muslos en señal de nerviosismo acariciando estos para secar el sudor de mis manos.

Yoongi lo notó así que cogio mi mano llevándola a sus labios.
--------¿Qué puedo hacer para que estés tranquila?. Susurró dejando un pequeño besito en el centro de esta.

--------¡Sólo quédate conmigo!. Le imploré.
--------¡Eso hago!.
Su mirada encantadora me hacía creer ciegamente en Él. La seguridad que emanaba... su aura, todo Él... todo lo que es Yoongi me hacía tener fe y seguridad de que estando a su lado nada podría hundirme en la miseria otra vez.