Querido (des)conocido - [Cristessi]

O

Hola!

¿Qué pensaron? ¿Que Ali ya no iba a publicar capítulo nuevo?

Uh-uh jejeje Si bien, me disculpo por el retraso, pero sucede que fui madrina de confirmación así que desde temprano he andado del tingo al tango, pero ya volví OwO

Sí un capítulo más!

Muchas gracias por su apoyo!

A leer!

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No debió darle tanta importancia a la promesa de Lionel. No debió tocarse una vez entró a la ducha luego de la cena que tuvieron en ese restaurante con tintes románticos.

Cristiano se conformó con dedearse imaginándose al alfa y gemir el nombre de este cual zorra barata. La mirada predatoria de Lionel seguía estremeciéndolo incluso en los sueños. Una reverenda molestia.

Aunque no tan molesto como las leyes qataríes que lo obligaban a usar una gargantilla y brazaletes de plata fuera del estadio. Si tenía un partido o entrenamiento, debía reemplazar los accesorios metálicos por unos de tela. Al principio fue incómodo, pero no tardó en acostumbrarse o ignorar que portaba algo que gritaba a todo el mundo que seguía siendo un omega soltero.

Así pasó los días previos al encuentro con Ghana. No, él no vio el partido de Argentina contra Arabia Saudita. No, por supuesto que no se enojó al saber el resultado. No, no llenó de mensajes el chat que tenía con Lionel. ¿Quién creían que era Cristiano?

No, tampoco sonrió como bobo cuando recibió un mensaje de felicitaciones por parte de Lionel tras ganarle a Ghana.

Pero, entonces, llegó el partido Argentina contra México y desde el inicio Cristiano frunció el entrecejo. ¿Por qué ese tal Ochoa abrazó a Lionel antes de ingresar a la cancha y por qué el enano aceptó el gesto?

Si mal no recordaba, Ochoa era un omega, ¿no? A ver, en Google debía haber información de ese estúpido. Efectivamente, Guillermo Ochoa era un omega.

Su humor empeoró conforme el partido avanzaba. ¿Cuándo anotarían los argentinos? ¿Por qué tantas faltas? ¿Quiénes estaban jugando: cachorros o adultos?

¡Sí, sí, Lionel! ¡Al fin un gol contra México!

Momento... ¡¿Por qué se tomaron de la mano Lionel y ese omega insípido?! ¡¿Por qué la mano del alfa estaba tocándole el trasero a ese imbécil?!

—¡Lionel es mío! ¡Mío y de nadie más! —gruñó en la soledad de su habitación.

Un gruñido furioso vibró en el pecho. Ronaldo había llegado al límite. A lo largo de los años soportó que perras se le acercaran a la Pulga, pero ya no más. Decidió que a partir de ese día reconocería ese sentimiento que lo había estado acompañando por poco más de una década. Abrió ese baúl en el cual lo había mantenido encerrado y aceptaría que estaba enamorado de Lionel Messi, del hombre que lo arruinó deliciosamente.

Sí, Cristiano Ronaldo dos Santos Aveiro amaba a Lionel Andrés Messi Cuccittini.

.

«Nos vemos mañana en el Centro Comercial Villaggio a las dos de la tarde.»

—Esto es raro.

—¿Qué cosa, Leo? —inquirió Emiliano.

La selección argentina estaba cenando en un restaurante cercano al hotel en el que se hospedaban luego de la victoria contra México.

—Uh, nada —replicó Lionel, bloqueando el móvil luego de responder el mensaje.

—No le creas Emiliano —intervino Lisandro—, este gil debe estarse mensajeando con una de sus tantas conquistas.

—¡Déjanos algo, Leo! —exclamó Di María.

—Que nos va a dejar algo —añadió Nicolás— ¿no vieron como hasta conquistó a ese omega mexicano?

—¿Al guardameta? —Ese fue Nahuel—. ¿No es alto?

—Así le gustan a nuestro Messi —afirmó Emiliano con una sonrisa vulpina—. Le gustan altos, grandes, nalgones y tetones.

—Tiene buenos gustos —secundó Marcos.

—Pero ese omega solo era alto, ¿no? —preguntó Emiliano.

A esto le siguieron burlas y abucheos cuando Lionel negaba afirmaciones insulsas. Él solo quería dormir y que ya fuera el día siguiente para tener una segunda cita con su omega.

.

Este hombre era la perdición de Lionel, no cabía duda.

Ambos se encontraban encerrados en un cubículo de los baños públicos del centro comercial. Ni bien llevaban una hora recorriendo las tiendas y hablando de trivialidades, Cris ingresó al baño. Al verlo tardar, Lionel pensó lo peor y fue por él con el corazón latiendo a mil por hora para luego ser arrastrado a un cubículo.

Fue cosa de que el pestillo fuera puesto para luego sentir los labios de Cristiano. Messi no tardó en corresponder al beso desesperado, jugando con la lengua contraria a la vez que sus manos eran guiadas a unas nalgas firmes que no demoró en apretujar. Debido a esto, las pelvis de ambos se apegaron y una fricción agonizante les hizo sisear. Desconocía de donde provenía este comportamiento posesivo y necesitado, pero no iba a negar que le agradó.

—Lionel —gimió el portugués por lo bajo cuando rompieron el gesto.

Los labios hinchados y húmedos eran una visión preciosa.

—A qué vino esto, ¿eh? —murmuró la estrella argentina, moviendo las caderas contra el bulto marcado en los jeans ajenos.

—Un recordatorio, pouco alfa.

—¿Sí?

Ronaldo asintió mientras se mordía el labio inferior para no dejar salir sus gemidos.

—Para que no olvides qué puedes perder si no cumples tu promesa —susurró Ronaldo, sonriendo con autosuficiencia.

Si así gustaba recordar promesas, Lionel se encargaría de prometer tanto como le fuera posible en el futuro.

—¿Qué tal si me recuerdas en un par de días, Cris?

—Maldito calenturiento.

—No te maldigas.

Un golpe en el hombro hizo sonreír a Lionel quien apretujó esas nalgas redondeadas y en las que se enterraría muy pronto.

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¿Y bien? ¿Alguien se puso celoso, vea?

Sí, este capítulo es un poco corto u,u 

Ya casi llegamos a la mitad de este fic OwO

Mañana estaremos en los cuartos de final uwu

Cuídense!

AliPon fuera~*~*