IX

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Esto era muy incómodo. Ambos suspiramos antes de que Jace comenzara a hablar.

-Bueno... Desde que tocaste mi puerta desesperada buscando un supermercado, me pareciste muy guapa. Por eso cuando volvimos, tú y yo... Bueno, ya sabes - dijo sonrojándose, refiriéndose a que nos habíamos acostado -. Fuiste la primera que...

-¿¡Eras virgen!? - grité. Todo el restaurante nos miró. Bajé mi cabeza avergonzada, al igual que Jace.

-No grites Nick, por Dios. Qué vergüenza - dijo pasando su mano por su cara.

-Ya, no me digas - ironicé.

Todo volvió a la normalidad y la gente dejó de mirarnos.

-No era virgen - respondió -. Quería decir que fuiste la primera chica con la que me acosté sin conocerla.

-¿A qué te refieres con "conocer"? - hice comillas en el aire.

-Bueno... Mi primera vez fue a los diecisiete y fue con mi novia. Llevaba con ella un año y ocho meses.

-Y... ¿Solo lo has hecho con ella? Bueno, y conmigo, claro.

-Estuvimos saliendo casi cuatro años. Lo dejamos hace... siete meses. Y hace dos meses llegaste tú.

-Nos estamos desviando del tema.

-Sí, fuiste tú, que empezaste a gritar como una loca.

-Céntrate Jace.

-Bueno... En realidad no sé muy bien qué decirte. Me pareciste guapísima y nos acostamos. Poco a poco fuimos cogiendo confianza y yo qué sé, te quiero Nick. No sé cuándo ni cómo pasó, pero me gustas. Tampoco es que esté súper enamorado de ti, pero me gustas. Sé que no sientes lo mismo, pero me conformo con que dejes de ignorarme y volvamos a ser mejores amigos.

-Espero que entiendas que a mí esto de los compromisos no me va... Ya me conoces, me acuesto con todo lo que se mueve - dije con lágrimas en los ojos.

-Ey, ey, ey - dijo levantándose y sentándose a mi lado -. ¿Qué ocurre?

-¿No lo ves? No quiero ser así, Jace. No me gusta. Me odio a mí misma. Soy una zorra sin sentimientos que en tan solo dos meses y medio se ha acostado con veinte chicos. Joder Jace, soy una persona horrible.

-Oye, no eres una zorra sin sentimientos. A ver, empecemos desde el principio: ¿hay alguna razón por la cual te acuestas con muchos chicos?

-Aquí no, por favor.

-De acuerdo. ¿Quieres ir al parque de al lado? - sugirió, yo asentí.

***

-Bueno... - limpié mis lágrimas - Mi primer novio "serio" - hice comillas - lo tuve a los quince. Yo estaba enamorada, ¿sabes? Fue mi primera vez. Todo era muy bonito hasta que... no sé qué le pasó, pero cambió, cambió muchísimo. Ya no era el chico del que me había enamorado.

-¿Qué pasó?

-Él... él me pegaba - tapé mi cara con mis manos y comencé a llorar. Noté los brazos de Jace rodeando mis hombros.

-Ey, tranquila. Shh, ya pasó - acarició mi pelo.

-Estuvo así como un mes. Yo ya no podía más Jace, no podía. Pero yo seguía enamorada de él. Llegaba a casa con heridas y morados todos los días. Cada día me inventaba una excusa distinta y mentía a mis padres. Llegó un momento en el que se lo tuve que contar a mis padres; ellos le denunciaron y le metieron en un centro de menores y cuando fue mayor de edad, a la cárcel. Cuando salió se fue a Europa y no he vuelto a saber de él - sequé mis lágrimas y respiré hondo.

Life is a party.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora