VI

39 4 1
                                    

-Bueno... yo...

-Déjalo Jace, no importa - sonreí y él suspiró aliviado -. ¿Voy a tu casa esta tarde y vemos un maratón de películas?

-Claro. Bueno, van a estar mis padres.

-No importa. Creo que ya es hora, ¿no? Llevamos siendo amigos más de dos meses.

-Bueno... Es que mis padres son especiales... Sobre todo mi madre.

-Bah, da igual. ¿A qué hora me paso?

-¿A las cinco?

-Vale, nos vemos - me despedí al notar que ya casi estábamos en mi casa. Besé su mejilla y me alejé mientras él seguía su camino.

Cuando entré, fui directamente al sillón, encendí la televisión y saqué mi móvil. Tenía algunos mensajes:

Owen Mr. Pizzas:

¿No quieres repetir? (13:47)

¿O simplemente me estás ignorando? (13:47)

Mensaje a Owen Mr. Pizzas:

No te estaba ignorando. Estaba trabajando. ¿No deberías estar haciendo tú lo mismo? (15:21)

Owen Mr. Pizzas:

Estaba en el descanso. (15:23)

¿Repetimos? (15:23)

Mensaje a Owen Mr. Pizzas:

Te avisaré cuando esté libre. (15:24)

Número desconocido:

Ey Nick, soy Danny. ¿Me recuerdas? (14:52)

Guardé el contacto como "Danny batido de fresa".

Mensaje a Danny batido de fresa:

Eres el de la cafetería de hoy, el del batido de fresa, ¿no? (15:25)

Danny batido de fresa:

El único e inigualable. (15:32)

¿Haces algo esta tarde? (15:33)

Mensaje a Danny batido de fresa:

Lo siento, he quedado. (15:34)

¿Qué te parece mañana? (15:34)

Danny batido de fresa:

¿Te voy a buscar cuando salgas de trabajar y vamos a comer por ahí? Yo invito, claro. (15:35)

Mensaje a Danny batido de fresa:

Salgo a las 15:00. Te espero, batido de fresa. (15:37)

Danny batido de fresa:

Hasta mañana, Nick. (15:37)

***

-Ya pensé que no vendrías - me saludó Jace, apoyado en el marco de la perta de su casa, además, en una pose demasiado sexy.

-Bueno, bueno. Tampoco exageres. Sólo me he retrasado... - miré mi reloj.

-Cuarenta y tres minutos - completó mi frase. - Ups, ya son cuarenta y cuatro.

-Ya, bueno. Lo superarás - rodé os ojos.

Sonrió y me dejó pasar.

-¡Cariño! - gritó una señora bajando las escaleras, que supongo que será la madre de mi amigo -. Tú debes de ser Nicole, ¿verdad?

Life is a party.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora