Omegaverse YuuMika

Capítulo 37

Yoichi se sentía desesperado, estaba embarazado y no sabía que hacer.

Quiso decirle primero a Yuu, en la fiesta no pudo y ahora no le contestaba, aunque ya tenía una idea de porque, con todo lo habían publicado y dicho en las redes.

Entonces a la siguiente persona que le debía de decir esto, era Gekkoin.

Se había sentado en una cafetería cerca de la universidad del alfa, estaba algo nervioso.

Gekkoin llegó y se sentó al frente de el.

— Yoichi que tal, lo siento por tardar tanto, con todo lo que está pasando me tienen loco, me incluyen en todo, Lacus es el más impresionado con esas noticias que salieron, tal vez deba decirle a Chess que lo calme un poco.

El omega lo vio confundido.

— Lo siento, me puse a hablar de cualquier cosa, que querías decirme.

No quería sentir la incomodidad al decirlo, pero debía de hacerlo, mejor ahora que más tarde.

— Estoy embarazado.

El alfa se sorprendió.

— Oh ¿Felicidades? — inclino levemente la cabeza — supongo que debe ser genial, a menos que sea otra razón por la que me hayas dicho esto.

— Porque crees que es, usa tu cerebro.

— Bueno, será por... — de repente se sorprendió aún más — acaso me lo dices porque es mío.

— Bingo — dijo serio.

— No, no, no puedes ser.

— Lo es.

El alfa sonrió.

— Es una gran noticia, siempre quise ser papá.

— ¿Que?

— Solo tengo dos metas en esta vida, acabar mi carrera y ser padre, pero no pensé que la segunda se cumpliera antes que la primera.

— Espera, no te adelantes en esto.

— Que, no me digas que piensas en abortar, no lo hagas por favor, me haré cargo.

— No lo sé, yo estoy con Kimizuki, es mi destinado.

— ¿No habías terminado con el?

— Que te hizo pensar eso — lo vió aún mas confundido.

— Ah pues, toda esta situación.

— Pues no, al menos aun no — se estaba poniendo nervioso — no sé que va a pasar con el y esto.

— Entonces este es el caso, Yoichi tienes una pareja, es tu destinado, aún no se lo has dicho, y cuando lo hagas no estará para nada feliz ya que es no es el padre, un alfa enojado en esa situación puede ser un peligro.

— Si, tienes razón.

— En ese caso, déjame acompañarte cuando hables con el.

— De ninguna manera, este es conversación entre Kimizuki y yo.

— Desde que me dijiste que era el padre, también es asunto mío, no quiero que les pase nada.

— No pasará nada.

— Como estás tan seguro, al menos piénsalo.

— Bien, lo pensaré.

— Gracias.

El alfa se levantó de su asiento.

— Tengo que regresar a la universidad, escríbeme cuando vayas a decirle.