Our Wish

1

La vida de Yeji se podría resumir en una sola cosa: Fracaso.
Y específicamente en el amor.

Su círculo social estaba rodeado de parejas con una bonita relación y amor sincero.
Desde que tiene memoria, nunca ha sentido la emoción de que le importas a alguien, ella ha sido la única que ha sacado ese sentimiento a la luz para que al final lo terminen pisoteando.

—¡Moriré sola y virgen como una monja!— sus gritos eran opacados por la música a todo volumen que había en la discoteca.

—¡Por dos!— Soojin una de sus compañeras de trabajo alzó el pequeño vaso que contenía una adictiva bebida la cual ya había hecho sus efectos.

—Solo quiero amar y ser amada— Yeji hizo un puchero hundiéndose en la silla.— ¿Acaso es mucho pedir?

Yeji miró aburrida a la gente bailar y cantar a la par.

Hasta en eso están sincronizados...

—Oye— Soojin tocó su hombro torpemente — ¿Que no mañana ibas a ir a una reunión con tus amigos?

—Si, pero...— detuvo sus palabras cuando saco su celular y vio la hora — ¡Madre mía! ¡Son las dos de la mañana!

—Puedes ir a mi casa para quedarte a dormir y después irte a la tuya por la mañana— Soojin le dijo mientras pagaba sus tragos a una de las meseras.

—Esta bien...

Yeji talló sus ojos mientras caminaba hacia la salida del lugar.

(...)

—Soojin, ¿cuánto tomamos anoche?— Yeji permaneció viendo el techo mientras la resaca le impedía hacer un mínimo esfuerzo.

—Tu te emocionaste—a diferencia de ella, Soojin estaba parada doblando unas prendas y moviendo las cortinas para que la luz entrara.

—¿Quieres que te traiga un te junto a la pastilla?— le pregunto viéndola desde su pocision.

—Por favor...— murmuró.

Cuando escucho la puerta de la habitación ser cerrada, Yeji se acurrucó más en las cobijas y la almohada cerrando un poco sus ojos.

Era la segunda vez en el año que empezaba y terminaba una relación de noviazgo.
Las últimas veces parecía desesperada por buscar apoyo en alguien.
La última persona que la terminó le recalcó eso.

—Tu estas buscando algo a lo que aferrarte, no es amor, es obsesión por no estar sola.

Y Yeji no lo iba a negar.
Creció en una familia algo disfuncional.
Su papá murió por el constante abuso del alcohol y su mamá también lo hizo unos años después dejándola a ella sola. Nunca tuvo hermanos.

Los años de la universidad los pasó rodeada de buenos amigos que la apoyaban en todo lo que necesitaba.
Hasta que se mudó por un tiempo al extranjero y volvió a Korea para ejercer su trabajo.

Tenía un buen lugar donde vivir, pero no tenía lo que más quería con todo su corazón.

Amor.

(...)

—¡Unnie!— Yuna se abalanzo sobre ella.— ¡Hace mucho que no te veo! ¡Tengo tantas cosas que contarte!.

Yeji se dejó guiar por la más pequeña del grupo de amigos.
Entraron a la sala mientras ella saludaba con la mano a los demás.

A diferencia de ella, los demás parecían estar bien con su ritmo de vida.
Lía y Lee know estaban de viaje y Yuna estaba viviendo su amor joven junto a Jeongin.

Hyunjin y Félix eran los que parecían mas estables.
Además de demostrar ser una hermosa y cariñosa pareja.

—¿Cómo va todo?— Ryujin se acercó para preguntarle.

—De mal en peor...

—¿Quieres hablar de eso?

—En otro momento Ryu, se supone que si vine fue para divertirme con mis amigos— le dio una sonrisa de boca cerrada.

Durante un buen rato estuvo vagando con distintas pláticas y comiendo uno que otro bocadillo, hasta que tocaron el timbre.

—¿Puedes ir?— Jisung le dijo mientras llevaba un tazón grande de papas a la sala.

Yeji encogió los hombros y se dirigió a la puerta. El departamento en el que estaban no era como cualquiera.
Parecía casi una casa normal.
No se podía decir más cuando todos tienen los medios para vivir así.

—Hola Ji— en cuanto abrió la puerta de encontro con la figura de Félix, solo que extrañamente sin su peculiar sonrisa.

—Hola Lix— Yeji inclino la cabeza a un lado— ¿Y Hyunjin?

—No pudo venir, surgieron algunas cosas— vio como miraba hacia otro lado apretando los labios.

—Esperame aquí— lo metió de jalon adentro y corrió a la cocina— ¡Chaer!— le hablo a la primera persona que vió, ella volteo — dile a Ryujin que saldré unos minutos y después volveré, pueden comenzar sin nosotros.

—¿Nosotros...

Dejo la pregunta en el aire pero para ese momento Yeji ya había desaparecido de su campo de vista.

(...)

Yeji condujo a Félix a la terraza de abajo donde se encontraba el enorme edificio de departamentos.

—Dime, ¿que sucedió? Porque ustedes siempre están desbordando amor a dónde sea que vallan, ustedes son los únicos que me hacen tener esperanza en el amor — Yeji lo miro a los ojos.

—Realmente cuando hablas de nosotros, tus ojos brillan de emoción

—Obvio, son mi pareja favorita — Yeji le guiñó un ojo, ellos eran los únicos a los que les tenía más confianza— ahora sí, ¿Quieres decirme?

Era irónico que aunque Yeji era la que necesitaba ser escuchada, siempre estaba dispuesta a ser la que preste atención a los demás.

—Bueno... hemos tenido problemas en cuanto a la vida futura que nos espera. Hyunjin pronto asumirá el puesto de CEO en la empresa de su abuelo, pero para que eso suceda hay una condición— Félix hizo una pausa— tener un sucesor después de Hyunjin.

—¿Un hijo?— Yeji pregunto.

—Asi es— asintió — pero quiere que tenga la sangre de la familia, lo que quiere decir que no se nos permite adoptar.

—¿Y eso ha provocado conflictos?

—De alguna manera sí, Hyunjin tiene menos de dos años para que esa condición se cumpla. Si no pasa, el mandó pasará a manos de su primo, quién es conocido por ser un total holgazán y tonto con los negocios.

—Es algo complicado.— Yeji suspiro frustrada como si ella estuviera involucrada.

Se quedaron en silencio por un momento, la noche estaba dando comienzo.

—Ustedes son mis mejores amigos Lix— Yeji agarró sus manos— si tuviera la posibilidad haría lo que fuera para verlos a ustedes felices y tranquilos. Hyunjin te ama, y no dejará que esto se interponga en su relación, créeme— le dio una sonrisa genuina.

Aunque Yeji no pensó que sus palabras traerían una idea a la cabeza de Félix.