Decisiones Apiladas

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El stream terminó y con ello todos los pendientes que tenía Maia, fue una noche divertida junto a sus amigos y esto se podía reflejar en los múltiples clips que comenzaban a circular en las redes, divirtiendo a más de uno con las caídas, insultos y anécdotas que fueron protagonistas del stream.

Al salir del set-up Maia se encuentra a Carlos con un delantal puesto, no era el mismo del stream de cocina, era amarillo con un estampado de abejas.

—¿Y ese delantal? – Pregunta acercándose a él con una sonrisa. – Está bonito.

—Tuve que salir a comprarle algo a mi madre, lo ví en una tienda y me lo pillé, me hizo acordar a algo que comentaste una vez.

—¿Qué mi hermana me dice abejita porque me llamo Maia? – Carlos asiente con una sonrisa y su novia va a abrazarlo con una expresión de ternura. – Me encanta eso de tí ¿Sabes? Eres muy atento a todo, incluso con detalles tan pequeños y yo bueno... A veces siento que no te doy todo lo que mereces.

—Estás totalmente equivocada, ¿Sabes por qué? – Maia niega mirándolo con curiosidad. – Porqué me das algo que muy poca gente tiene, amor, felicidad, tranquilidad, apoyo; creeme que con eso estoy más que satisfecho.

Esas palabras son selladas por un beso de algunos segundos. — Yo te amo pero, estamos haciendo de todo menos cocinar, corazón.

—Vale, tu dime qué hacer, yo no tengo ni la más mínima idea de cómo empezar esto. – Carlos toma la bolsa de arroz buscando algo con la intención de abrirla.

—Tienes dos opciones, hacemos un arroz con pollo normalito, sin nada muy especial... – Maia a ver sus intenciones le quita la bolsa, conociendo lo haría que la castaña tuviera que limpiar granos de arroz del suelo. – O te enseño a preparar el arroz con pollo al estilo venezolano.

—Estilo venezolano.

—¡Eso vale! –Exclamó sacando su acento nativo. – Empecemos, pásame el cuchillo.

Al no ser la primera vez que cocinaba con Carlos, Maia sabía que sería un poquito estresante, ya que era como cocinar con un adolescente que solo sabe encerder la cocina y freírse algunos huevos.

—Tengo miedo de que hagas eso y termines sin un dedo. – Dice mientras lo ve intentando hacerle los cortes a la pechuga de pollo. – No, no, no, déjame a mí, que después le tendré que dar explicaciones a la pobre Mercedes.

—Pero, relájate, puedo hacerlo. – El cuchillo se resbala quedando a centímetros de sus dedos. – Pensándolo bien, mejor corto los vegetales.

—¿Si recuerdas como se ven las cebollas o te las busco? – Carlos se voltea y le saca la lengua a su novia por su mala broma. – Ámame.

—Te amo pero sueltame el brazo.

Luego de un rato, Maia escucha como Carlos sorbe su nariz mientras picaba la cebolla.

—Joder, esto si pega.

—Cuando estés allá, ten presente que las cebollas debes cortarlas rápido para que no te haga llorar. – Recomendó, si no tendría un Carlos llorón junto a un Axozer quemado. – Ya pareces yo viendo Chat Blanc.

—Aun no me creo que Adrián se haya intentado dar cataclismo otra vez.

—Pa' que veas que la serie no es para niños. – La preparación continuó, ya con todo picado empezó el proceso de cocción.

Lo particular del arroz con pollo que se hace en Venezuela es el color del mismo, gracias a la curcuma que contiene el condimento que se le añade este queda en un tono amarillo, además de tener guisantes en la preparación.

Una Nueva Vida | Streamers Donde viven las historias. Descúbrelo ahora