One Shots

Victor Zsasz

Pedido de raymc000, espero que te guste.

Elisabeth amaba con locura aquel chico; sin embargo, tras unos meses siendo pareja Victor no mostraba atención a la joven, la pelirroja no podía estar más decepcionada. Sus amigas le habían avisado, la gente que conseguía lo que quería solía aburrirse de las cosas fácilmente.

Para su buena suerte el joven no parecía tener ningún encargo para aquella noche, Elisabeth no podía estar más contenta.

- Han abierto un nuevo club cerca de aquí. ¿Podríamos ir no?- Propuso la joven.

¿- Mhm? A sí, lo lleva Pingüino. No estaría mal un poco de diversión.- Dijo el joven con una sonrisa pícara. Así que aquella noche al menos la iban a pasar en el mismo edificio, eran pocas las noches que Elisabeth podía ver a Victor ya que se dormía antes de que este volviera. ¿Si era un sicario porque tenía tanto trabajo? ¿No tendría que haber un periodo de tiempo en el que no tuviera encargos? Eran algunas de las preguntas que se hacía la pelirroja.

¿- Vamos?- Preguntó Victor quién ya se encontraba frente a la puerta para salir.

- Vamos.- Afirmó Elisabeth apareciendo a su lado.- Ese traje te queda muy bien.

¿- A caso me lo pondría si no fuera así?- Soltó el chico con sarcasmo, por su parte la joven solo rodó los ojos y tras coger las llaves de la casa ambos salieron.

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Aunque Elisabeth había propuesto ir juntos al club para poder pasar un poco de tiempo en pareja, Victor hacía caso omiso a la joven. Entonces la pelirroja tuvo una idea, lo pondría celoso. Así que se dirigió a la pista donde muchos bailaban, entonces vio a un chico que no paraba de mirarla, ella no desaprovechó la oportunidad y se puso a bailar con aquel chico observándola. Cada vez ese joven estaba más cerca, hasta ahora por la luz no había podido ver de qué se trataba de un hombre bastante joven, de cabellos castaños.

¿-Puedo?- Pregunto el chico acercando sus manos a la cintura de Elisabeth, quién asintió. Buscaba la mirada de su pareja quien ya hacía rato la observaba con una mirada juguetón, una parte de Víctor quería ver hasta dónde llegaba Elisabeth, pero otra parte de él quería ir y partirle la cara al idiota que se atrevería a tocar a su novia.

Terminó recordando que era un club de Pingüino, no iba a armar jaleo, pero no iba a seguir permitiendo que tocaran a su chica.

¿-Qué estás haciendo Lis? ¿Tanto me necesitas que te conformas con el primero que te mire?- Soltó Víctor bastante molesto, a la vez que miraba fijamente al castaño.- Tío ella tiene novio, estoy aquí, deberías aprender a no tocar lo que no es tuyo.

Elisabeth se apartó del de cabellos castaños y se acercó a su novio, puso una mano en su pecho y la otra en su cuello, Víctor no lo pensó dos veces y la beso enfrente de aquel chico que había estado bailando con ella.

- Si querías pasar más tiempo juntos, solo tenías que decírmelo.- Comentó juguetón.

- Creía  que era una buena idea...

- Claro, poner a tu novio celoso es lo mejor que puedes hacer.- Comento sarcásticamente, observaba los labios de Lis, ahora eran ellos quienes bailaban, era él quien tenía sus manos en las caderas de la pelirroja.