Danganronpa Kirigiri (Volumen 2)

Capítulo tres, parte tres

"Oh... Dinero..." dijo Sae con una voz que sonaba muerta.

"Bueno, ¡mi novia tiene 55 años y tiene mucho dinero!" La voz de Seiunsai resonó detrás de Uozumi. Uozumi lo ignoró y terminó de recoger el dinero.

"Ahora, párate enfrente de la chimenea y tíralo todo".

¿La chimenea? Tuve un mal presentimiento.

"Vale".  Tiró todo el dinero que había acumulado al fuego.

"Hay un fósforo justo al lado, deja que el fuego continúe".

"¡Hey!" Finalmente, Minase se levantó. "¡Doscientos mil son míos!"

"¿Huh? ¿Estás seguro de que hay tanto?" dijo Sae, riéndose.

"¡Cállate, cabeza de chorlito!"

"¡Eres un bastardo! ¡¿Sabes lo difícil que es hacer dinero?! Y le ordenas a encender un fuego como si no pasara nada. Es un crimen quemar dinero, ¡especialmente en cantidades tan grandes!"

"Dinero... Quiero morir".

"¿Es esto una conspiración del gobierno?"

En la mesa, había un gran caos, y Uozumi se acercó a la chimenea para iniciar el fuego.

"¡Hey, para!" Minase corrió hacia la chimenea, y agarró el hombro de Uozumi.

"Bueno, tú eres el culpable de venir a una subasta tan loca, ¿no?" respondió Uozumi brevemente, y entonces escapó de Minase, girándose a la chimenea, donde los billetes ya se estaban quemando en un gran fuego. Mi dinero...

"¿Cuál es el problema?" dice la voz de Norman. "No estéis tristes. En cualquier subasta, da igual cuánto dinero tengas, no sirve de nada".

"Cállate" dijo Minase, cerrando los ojos.

"¿Por qué tan irritables? De hecho, mirad debajo de vuestras sillas".

Me incliné para mirar debajo de la silla. Había una gran bolsa de lona. La cogí por abajo. Era muy pesada. Realmente pesada... No estaría sorprendida si alguien me contase que pesaba más de diez kilos. Parecía que todo el mundo tenía una. Abrí la bolsa. Dentro había 10.000 yenes (80 euros) en billetes, atados juntos.

Sin embargo, el hecho de que los billetes estuviesen en montones de tanto, y que hubiese toneladas de pilas significaba que había casi 100 millones de yenes (800.000 euros). 

"Hay tanto... Nunca había visto tanto," dijo Minase, llorando en su voz.

"Aparentemente todo real," dice Uozumi, que había deshecho un montón de billetes para tocarlos.

"Es vuestro dinero. Antes de la futura subasta, cada uno tendréis 100 millones de yenes. Sería aburrido si solo el más rico pudiese ganar. Quería al menos que fuese justo. Bueno, es más que un pequeño regalo".

"Oh, gracias," dijo Minase, observando la pintura con admiración.

"Cuando tienes tanto dinero, ¡puedes vivir para siempre! ¡Quiero casarme con alguien pronto, tener un hijo y construir una familia feliz!" Sae parecía no ser la misma persona nunca más.

"Pero ahora, ¿podemos saber qué va a pasar? Dándonos tanto dinero..." Mifune tenía su cabeza en la mesa.

"No puedo creer que tengamos tanto dinero," dice Shinsen con los brazos cruzados. ¿Qué tipo de objeto será exhibido aquí?"

"Creo que es hora de ir al meollo del asunto. Recordad lo que estoy diciendo, porque solo explicaré las reglas una vez". Como detective, no podía imaginar lo que me esperaba. Por miedo a olvidarlas, saqué mi libreta para escribir las reglas.