Danganronpa Kirigiri (Volumen 2)

Capítulo cuatro, parte tres

Kirigiri y yo estábamos sentadas una al lado de otra, apartadas de los demás. "Incluso si nos faltan tres horas, nadie apostará" le dije a Kirigiri. Se quedó mirando al suelo, tocando su trenza con la punta de los dedos. "Como la subasta no es solo hoy, ¿cómo puedo asegurar que nuestro plan vaya, bueno, de acuerdo al plan?"

"El derecho del detective" dice Kirigiri. "Vale... Así que tienes miedo de que alguien piense 'tengo que ganar todos los días o seré asesinado'. Tenemos que encontrar una manera de que todo el mundo colabore. Después de todo, una persona podría decidir ir en contra del plan. Es egoísta querer sacrificar las vidas de personas por tu cuenta, pero ese es el modo de vida humano. ¿No has pensado alguna vez en cosas como esas, Yui-oneesan?"

"Guau, no sabía que eras tan filósofa".

"Creo que es el mejor momento para serlo" dice Kirigiri. "¿Por qué te ríes?"

"Tienes solo 14 años, pero suenas como si tuvieses 49" dije con una carcajada.

"...Por cierto, ¿lo has notado?" dice Kirigiri.

¿Qué? Kirigiri era extremadamente buena en cambiar de tema.

"¿Qué pasa?"

"La organización criminal está cerca".

"Oh, eso es... ¿bueno?" grité. Todos ojearon hacia nuestra dirección, pero apartaron la vista después de darnos miradas aburridas. Concentré mi atención en Kirigiri y hablé, todavía lo suficientemente alto.

"¿Por qué lo piensas?"

"El Norman que vimos era de un vídeo pre-grabado. Si el perpetrador estaba en algún otro lado viéndonos, podría haber hecho esto en tiempo real, pero no lo hizo, porque no podía. Está entre nosotros después de todo".

"¿Pero cómo predijo nuestras reacciones?"

"Es fácil desviar la atención de alguien y guiar la conversación. Estoy decepcionada de que no sepas eso, Yui-oneesan".

"Oye, soy algo estúpida, ¿vale?"

"No importa. Así que es fácil pre-grabar respuestas por adelantado. A veces Norman era muy contundente, y sus respuestas eran algo extrañas a veces".

"Vale..."

"Suisei incluso le hizo una pregunta para asegurarse, y Norman lo ignoró, cuando no tenía ninguna razón para hacerlo. No era ni una operación muy difícil de hacer. El culpable simplemente podría haber escondido un control remoto para pausar la grabación cuando quisiese".