FRUTO PROHIBIDO-Tobirama x tú

🔷Cap.18 En la oficina🔷

Advertencia: Este capítulo contendrá escenas +18, posible lenguaje inapropiado, y escenas subidas de tono, si eres menor de edad no me hago responsable, lee bajo tu propia responsabilidad.
Si no te gusta este tipo de contenido puedes saltarte este capítulo al otro.
Gracias por su atención.
Ahora si, empezamos con el capítulo 😌

POV _________

Tobirama me sostenía fuerte de la cintura, mientras me besaba ferozmente aprisionando mi cuerpo contra su escritorio, haciendo que pasara mis manos a su cabello.

Al separarnos por falta de aire, incliné un poco mi cuerpo para atrás, alejando mi rostro del suyo.

—Espera, alguien podría vernos

—Si haces mucho ruido nos van a descubrir —se acercó a mí con intenciones de besarme otra vez pero puse mi mano en su boca

—¿De verdad no te molesta hacerlo en tu oficina?

—Para nada

—Supongo que es porque ya lo has hecho con tus anteriores novias aquí —susurré desviando mi mirada

—En realidad, no, jamás lo he hecho en una oficina, con ninguna de mis ex novias lo hice

—Pero, esa vez que te vi con Enji —lo miré confundida esperando una respuesta

—Ella quería que lo hiciéramos pero no la dejé. No me gusta combinar mi vida personal con el trabajo, pero tú eres la excepción. Serías la primera y única mujer con la que lo haría en una oficina

—¿Lo estás diciendo solo para que lo hagamos de una vez? —pregunté en un tono divertido, acariciando sus hombros

—No, te lo prometo, nena... —me miró durante unos segundos fijamente a los ojos, y como si de un imán se tratase, nuestros labios volvieron a unirse en un beso igual de apasionado al anterior

Fue subiendo poco a poco su mano por mi espalda, acariciando ésta, levantando en el proceso mi blusa, a la vez que iba quitando su corbata, y antes de poder continuar, tocaron la puerta.

—Tobirama, soy yo, Madara —al escuchar su nombre, rápidamente nos separamos

—Mierda, es mi papá, no puede vernos en esta situación —exclamé en un susurro

Nuestras ropas estaban desacomodadas, su cabello estaba alborotado, nuestros labios estaban algo hinchados y tenían un poco de mi labial esparcido gracias al besote que nos habíamos dado hace tan solo un momento.

—Estoy algo ocupado, Madara, espera un poco... —cada quien estaba concentrado arreglándose y limpiándose hasta que Tobirama me sacó de mis pensamientos —Nena, tengo un problema

Volteé a verlo y no vi nada malo, pero al bajar mi mirada para ver dónde estaba la suya, logré ver un bulto entre sus pantalones, exactamente, en su entrepierna.

¿Con tan solo unos besos se pone así?

—Ve a sentarte, yo voy a atender a mi papá, tú quédate sentado y no te levantes para nada —él hizo caso a mi petición y tomé una bocanada de aire antes de abrir la puerta

—¿________?, ¿Qué haces aquí?

—Estaba haciendo un trabajo con Tobirama —me inspeccionó con la mirada tratando de analizar todo

—Ya veo. —dijo no muy convencido —Se tardaron mucho en abrir

—Sí, es que estábamos trabajando y habían varios papeles regados, y no encontraba unos documentos que son muy importantes, pero ya los encontré