Guayaba 24.

33 5 1
                                    

Me despierto con mucho calor ya que Dan está pegado a mi como un chicle.

Me levanto cuidadosamente para no despertarlo y salgo de la tienda, tal parece que nadie se ha despertado.

Camino hacia donde pusimos la fogata ayer esperando encontrarla apagada, pero me sorprende ver que no lo está.

Miro a mi al rededor y es cuando veo a Fefa sentada en un tronco justo en la orilla del lago.

El verla así, pensativa y sola, me hace pensar en el pasado.

Nuestra infancia, cuando pasamos por la pubertad, nuestras rupturas amorosas, nuestros momentos difíciles en la universidad, nuestros problemas familiares, nuestro viaje y todo lo que nos ha pasado desde que llegamos a Forks.

Camino hacia ella y cuando me siento a su lado, volteo a verla.

Ella me sonríe.

—Está linda la mañana ¿cierto?

—Si— respondo mirando el cielo que aunque parezca raro, no está nublado del todo— por eso quiero decirte algo.

—¿Que cosa? ¿Es malo?

—Gracias.

—¿Gracias por qué? ¿Qué hice?

—Solo gracias por existir, eres una persona muy importante para mi y agaradezco que el destino nos haya hecho hermanas, tal vez no de sangre, pero lo importante es que nos queremos y nos encanta ver a la otra feliz, perdón si en algún momento te hice sentir mal o hice algo que te perjudicara, muchas cosas en mi vida han estado mal pero tú siempre has estado ahí para decir "la que llegue a final de año con vida, gana", me haces verle el lado bueno a todo y me haces sentir especial, incluso en las peores situaciones... Sé que parece raro que esté diciéndote esto tan temprano en la mañana pero es que en serio quiero darte las gracias por absolutamente todo lo que has hecho por mi.

—Imbecil, me harás llorar— responde ella tapándose los ojos.

—De nada.

—Te amo, bien sabes que todo lo que acabas de decir yo también lo siento y no tienes que disculparte por nada porque siempre has sido buena amiga... Pensándolo bien, si fuiste mala amiga cuando te comiste dos helados, yo me comí uno y le dijiste a mis padres que yo me comí tres, te dieron otro y a mi me castigaron...

—TENÍAMOS SEIS, YA SUPERALOOOO!!!

—PERO TE COMISTE TRES!!!

—ESTUPIDA TE SALGO CON ALGO LINDO Y TU ME SALES CON QUE COMÍ MÁS HELADO QUE TÚ.

—ES LA PEOR TRAICIÓN QUE ME HAN HECHO EN LA VIDA.

—¿SE PUEDEN CALLAR DE UNA VEZ?— grita Taeyang.

—SI, YA CÓMANSE UN HELADO JUNTAS Y DÉJENME DORMIR— grita Jackson.

Nosotras nos reímos y abrazadas comenzamos a hablar tranquilamente de otro tema.

***

La noche en Seattle se nos viene encima mientras salimos de una pizzería.

—Dios, voy a explotar— grita Jun— no debí comer tanto.

— Aprovecha de comer bien aquí porque cuando lleguemos a casa no haré absolutamente nada— dice Fefa tocando su estómago dramáticamente.

Siento la mano de Dan en mi cintura.

—Tampoco es que cocines mucho— y con esas palabras de mi novio, Fefa lo mira molesta.

—La otra vez les hice pasta.

Guayabas en acciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora