Guayabas en acción

Guayaba 19.

El último mes ha sido el más tranquilo que hemos tenido desde que llegamos y lo de la venta de queso resultó ser un éxito, el dinero extra lo estamos ahorrando para lo que vaya a necesitar con lo del tumor.

—¿Ya está listo?— pregunta Dan quitándome la bolsa con queso que estaba arreglando antes de irme a un viaje astral con mis pensamientos.

—Si, mi cielo— responde, él se lo entrega a la señora y luego me mira— lo lamento, he estado un poco distraída.

—Lo sé, ibas a meter una zanahoria junto al queso del señor Andrews, te chocaste contra la puerta y pusiste las latas de frijoles negros junto a las latas de comida para gatos ¿En qué piensas tanto?

Después de tantos exámenes, sé que el tumor no es maligno y la cirugía no es tan peligrosa, pero aún así, tengo pánico de que algo salga mal...

Todo el esfuerzo que todos están haciendo por mi, sería en vano y dejaría mucho dolor...

—Nada del otro mundo, todo está bien— miento dándole un beso fugaz en los labios.

—No te creo, pero igual acepto tus besos—responde mirándome a los ojos.

—Eli llamó— nos interrumpe Fefa— dice que ella y su esposo van a cenar a un lugar bonito hoy.

Los tres sonreímos, Eli se fue hace dos días con su esposo para celebrar su aniversario.

—Que lindo lo mucho que aun se quieren, a pesar de que llevan muchos años juntos— digo y Dan asiente.

—Así debería ser.

Fefa está a punto de decir algo, cuando una chica se para frente a nosotros, es asiática.

—Me gustaría pagar esto, por favor— dice y mira con una sonrisa coqueta a Dan que le devuelve la mirada con el ceño fruncido.

—¿Qué demonios haces aquí? Vete, ahora— le dice mi chico.

—Wow Dan ¿y tus modales?

La chica sabe el nombre de mi novio, entonces se conocen.

Yo estoy a punto de preguntar, cuando Fefa habla con su voz llena de rabia.

—Precisamente a ti no te tienen que importar los modales de Dan, ahora, vete de aquí si no quieres que te saque a patadas.

Dan me mira, sabe que no entiendo nada.

—Es la ex de Jun— con esas palabras ya puedo entender todo, pues ahora vengo con mi lengua venenosa.

Suelto una risita con la intención de que la chica me mire y si lo hace.

—Con que...— con toda su atención puesta en mi, mis palabras salen como dagas— tu eres la perra que siendo novia de Jun, quería acostarse con Dan.

—¿Como me dijiste?— pregunta, obviamente molesta.

—Ay, disculpa ¿Te ofendí? Usé mal mis palabras, era "puta" que te quería decir.

—Te arrepentirás de tus palabras.

—La que se va a arrepentir serás tú si no te vas ahora mismo, mi paciencia se acaba— dice Fefa apretando los puños.

Ella nos da una sonrisa que no me gusta nada y se va.

—No entiendo qué hace todavía en el pueblo— recalca Dan recostándose de la pared.

—Yo tampoco, solo espero que no se acerque a ninguno de nosotros— dice Fefa, luego se va a llenar unos estantes vacíos.

Las horas pasan y al llegar la noche, cada quien se va a sus habitaciones, fue un dia agotador.