Estabas tratando de mantener los ojos abiertos mientras el reloj seguía haciendo click, la necesidad de cerrar los ojos se hacía cada vez más fuerte.
Estabas tratando de luchar contra eso, después de todo, Taylor iba a regresar a casa en aproximadamente una hora, seguramente podrías esperar ese tiempo.
Encendiste la televisión para colocar una película de terror en Netflix con la esperanza de que te ayudara a mantenerte despierta, pero no fue así; te estabas cansando aún más.
Un bostezo escapó de tu boca, tus ojos se cerraron y esta vez se sintieron demasiado pesados para abrirlos, finalmente cediendo y dejando que tu cuerpo se sumerja en un sueño muy necesario.
Sentiste un suave beso en tu mejilla y una mano acariciando tu cabello.
Abriste los ojos para ver a Taylor agachada a tu lado en el suelo.
"Hola cariño. Vamos a llevarte arriba"
Te quejaste pero agarraste su mano que estaba extendida para que la agarraras antes de levantarte y caminar lentamente por las escaleras, tus rodillas se sintieron débiles y tu cuerpo se sintió agotado y se sintió como una eternidad cuando finalmente llegaste a tu habitación compartida.
Te acostaste en la cama, Taylor te cubrió con el edredón antes de besarte la frente solo para descubrir que tus ojos ya estaban cerrados.
Ella sonrió, caminando hacia el baño para quitarse el maquillaje y tomar una ducha rápida.
Cuando salió, se cepilló los dientes y se cambió a su pijama antes de regresar a la habitación esperando encontrarte dormida una vez más, tus ojos se cerrarían y abrirían instantáneamente antes de cerrarse y abrirse; tratando de luchar contra el sueño que rápidamente se apoderaba de ti.
Caminó hacia su lado de la cama y se acostó, sus brazos te rodearon para acercarte a ella.
"¿Por qué no estás durmiendo? Cariño, sé que estás cansada"
"Quería esperarte"
Murmuraste contra su piel, tu cara enterrándose en su hombro mientras respirabas su fresco aroma. Tus ojos ya estaban cerrados de nuevo. Taylor no pudo evitar reírse y colocar un par de besos en la parte superior de tu cabeza.
"Estoy aquí ahora ___. Duerme un poco. Te amo"
Ella susurró contra la coronilla de tu cabeza, sabía que ya estabas dormida pero tenia que decírtelo.
Simplemente se sintió bien decirte esas dos palabras simples pero hermosas y significativas en la remota posibilidad de que pudieras haberla escuchado.
Pero no importaba, tú ya sabías que ella te amaba y sabías que incluso cuando no respondías, tú la amabas de vuelta y eso fue suficiente para ayudarla a cerrar los ojos para dormir en paz como lo había soñado y esperaba que tú soñaras con ella.
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