Steven X Spinel "Un Futuro Negro"

Capitulo 35: nuestro ultimo día vivos

Finalmente, el día había llegado. Anhelado por unos y despreciado por otros. Mas la mirada de steven ante el amanecer a través de su ventana, denotaba la seriedad del momento. Listo para bajar mucho antes de escuchar la voz de amatista llamarlo para desayunar. Orgulloso al igual que confuso, steven tenia sentimientos contrarios al empezar a volver poco a poco hacia aquellas costumbres familiares tan básicas como desayunar juntos, agradecido por haber pasado dicha noche de películas juntos, ahora consciente de que fue justo en su cumpleaños 21, cuestionándose si acaso las chicas lo sabían y esa fuera su principal razón para pasar el día juntos, anhelando ciegamente que así fuera. Aquella reunión con spinel que transcurrió una semana ya, sin ninguna interacción entre ambos, ni deseo de hacerlo. Intentaba no recordarla, pues lo hacia cuestionarse mas a si mismo respecto a todo lo que ha echo.

"¿Es esta la única forma de ganar, o solo es la mas fácil?"

"¿Que piensan todos de mi?, las chicas, spinel... las diamantes... ellas... siendo honesto no se como reaccionarían... lo siento mucho, pero ustedes mismas me dijeron que debo estar dispuesto a sacrificar para ganar"

"Muy en el fondo... temo ganar hoy... y tener que sacrificarlas" 

"¿De verdad estoy haciendo lo correcto?, y aun que así fuera... ¿A que costo?"

Dejando toda duda en su habitación, intercambiada por aquella fotografía juntos que ahora portaba en su chaqueta, llegando a su cocina para compartir un momento que temía extrañar después que el día termine, igual que todos los presentes, que se cuestionaban si aquel día, se volvería su ultimo.

— como sea, ¿Listos para morir? — preguntaba amatista a manera de broma. Una horrible y triste broma, que poco a poco hiso reír a todos los presentes

....

Llegando a la base central, steven notaba sorprendido como solo ellos 4 se encontraban presentes en el lugar. Desconociendo la dura verdad de que las 3 gemas que lo acompañan tampoco estarían de no haber rechazado su idea de salir. Molesto, el chico caminaba por la base, ansioso por lo que el futuro le preparaba al anochecer y, paciente mientras buscaba a los ausentes en la sala. Encontrando primero a lars, que parecía estar rezando, frente a las pequeñas lapidas que el mismo coloco para rememorar a las estrella lunar. Sin intención de interrumpirlo, se uniría a el, hincándose a su lado.

— je — de la nada, una pequeña risa salía del capitán que habría los ojos para mirar a su acompañante — en realidad no tengo idea de que estoy haciendo, nunca fui alguien que creyera en un dios, ni siquiera cuando conocí todo lo mágico de la galaxia

— ¿entonces por que lo haces? 

— spinel solía hacer antes en sus primeras misiones, y cuando... ellas... se fueron — respondía mirando a las lapidas — ... me gusta pensar que están en un lugar mejor, orgullosas por que seguimos adelante a pesar de toda la basura que ha pasado y... jun...

— ... partiremos en una hora lars — decía este serio para levantarse y empezar a alejarse — prepara las naves

— ... olvídalo — susurraba lo ultimo el rosado

....

Pasando por las salas vacías de lapis y peridot, steven avanzaba sin problemas a través de la multitud desesperada de gemas que corrían por todas las calles de la base. Evitándolo como si fuera el nuevo diamante negro, y otras lo alababan como si de la reencarnación de las diamantes fuera. No importaba si evitaban el contacto visual, o si se postraban ante el, el hibrido se centraba únicamente en llegar a su destino.