Capitulo 34: revelaciones

20 2 0
                                    

— ¿Dónde estoy?

Desorientado, steven observaba su alrededor en busca de algo que le intuyera donde se encontraba, sin resultado alguno en ningún detalle del campo lleno de flores de todos los tipos a su alrededor. La única excepción fue aquel extraño sentimiento de familiaridad, a pesar de su desorientación, era como una especie de Déjà vu, que le afirmaba conocer ese lugar tan desconocido para el

"universe"   

Y de pronto, todo se volvería conocido al escuchar aquel susurro a su espalda, observando como aquel hermoso campo minado en flores bajo el amanecer, se transformaba en un lugar mas conocido para el

"steven"  

Dando media vuelta para mirar con mucha sorpresa que después pasaría a horror. Era spinel, no era capaz de distinguir su expresión debido a la distancia, pero donde se encontraba, era mas que suficiente para hacerlo temblar. Al borde de aquel risco bajo el faro que tanto amaban, spinel se encontraba estática justo a la orilla de este, ante la vista de aquel hermoso atardecer que iluminaba las olas, resultando en un paisaje que capaz de cautivar cualquier corazón 

"tu""   

Sin embargo, el hibrido en su lugar, sentiría el suyo detenerse por completo al ver a la mujer delante suya, saltar del risco decidida, consciente de su trágico final

— ¡SPINEL! — corriendo a su lugar y bajo una falsa ilusión de salvarla, el chico saltaba igualmente del risco

Mientras caía, todo su alrededor se volvía mas claro, pues se empezaba a transformas en momentos importante para la pelo rosa, compartiendo todos ellos una peculiaridad, la ausencia del hibrido, que notaba con tristeza como todos esos recuerdos formaban una vida futura para su amiga, en la que el no estaría presente. Y de la nada, todo se apago, pues los deseos del chico desaparecieron  todos esos momentos de su vista, quedando solo en un vacío, totalmente negro

— ja ja ¡JA JA JA!  

Lo único que divisaba, era boca que reía desenfrenadamente delante suyo de una forma que el chico reconocía a la perfección por el odio que le tenia, pues sabia que si diamante negro reía, significaba peligro, escuchando sus carcajadas mezclarse con un grito de dolor que bien conocía, tan fuerte y tan real, proveniente de quien mas amaba

llegando al limite, steven finalmente se rompería — ¡BASTAA! — gritaba en frustración, un grito tan real, que lo llevaría a despertar — ¡haa!... — y observar las nubes rosadas a su alrededor  


....


Lavando su rostro en el lavamanos de su baño, el chico despertaba ante el recuerdo de todo lo vivido. Fue solo una pesadilla, ¿cierto?, independientemente de la respuesta, la verdad es que llevaba atormentando toda la noche, de la mayoría de días.

Terminado todo deber, steven tomaba su ultima prenda, el cual era su característico suéter rosa, sin embargo, al igual que todas las demás ocasiones, no podía evitar recordar la fascinación de la pelo rosa por este, llevándolo ese sentimiento a observar con seriedad las fotos que ambos tenían juntos, ese día definitivamente estaba mas nostálgico 

— ¿debería volver a hablar contigo? — cuestionaba en voz alta — ... quizá después  — afirmaba para colocarse la prenda y salir de su cuarto


....


Tomando su micrófono, steven informaba a toda gema presente en la base de los escasos minutos restantes antes de partir, haciendo lo mismo con todos los presentes en la sala de mando, quienes abandonaban el lugar en busca de todo lo necesario para la misión, en algunos casos eran armas que prefirieran por sobre la suya, o alguna granada o articulo que guardaban en su gema para utilizar después, en casos como la mayor amatista bismuto, verdaderamente no tenían algo necesario ajeno a lo que les brindara su gema, limitándose a despedirse de quienes consideraban cercanos. De regreso en la sala, ahora solo se encontraba el hibrido junto a las gems

Steven X Spinel "Un Futuro Negro"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora