Aprender a besar [MoHyo]

Capítulo 1

Jihyo no se consideraba una persona con mucha fuerza de voluntad, y ver a Momo tan animada pidiéndole que le enseñara a besar no se lo hacía más fácil.

— Nayeon me matará si se entera, es que, ¡no puedo creer que me pidas esto!, es una locura.

— Solo quiero que me enseñes, serán besos de amigas, no pasará nada malo, te lo prometo.

Los grandes ojos castaños de Jihyo miraron atentamente a Momo. Brillaban de una manera que pocas veces se había visto.

Alzó su mano y acarició lentamente la rosada mejilla de Momo.

— Está bien. — Sonrió, sin dejar de acariciar a Momo — No puedo negarme si lo pides así.

Momo también sonrió, y se dió cuenta de que sus rostros estaban a menos de cinco centímetros.

— ¿Qué tal si comenzamos justo aho-

— ¡Llegamos! — Dahyun abrió la puerta repentinamente, asustando a Momo y a Jihyo. Probablemente la chica hubiera estado confundida por la cercanía del duo si no fuera por las enormes cajas que cubrían su rostro.

No pudo ver que casi se besaban, o que sus rostros estaban muy rojos.

— L-llegaron antes. — Jihyo fingió toser y se levantó para ayudar a Dahyun, mientras veía como las demás miembros entraban.

— Si bueno, nos aburrimos. — Tzuyu habló, restándole importancia.

Nayeon se acercó a Momo y se tumbó arriba de ella.

— Te extrañe.

— Solo fueron unas horas Nay...

— Aún así. — Le sonrió a Momo — Me cuesta estar sin ti.

Jihyo miró a lo lejos la escena romántica, y sintió sus ojos picando.

— ¡Jyo!, te compré tu cereal favorito. — Sana sacó de una bolsa una gran caja de cereal de colores.

Park dejo de prestar atención a la pareja y miró a su amiga con gratitud.

— Gracias Sana.

— Para nuestra hermosa líder lo que sea.

— ¿Estaban viendo sus mierdas románticas otra vez? — Jeongyeon río al ver la película pausada en la tele — Jihyo y Momo son muy cursis.

— Lo dices como si no la hubieras visto diez veces antes. — Chaeyoung bufó.

— ¡Calla Chaeng!

— Deberíamos ver algo entre todas, solo quiero relajarme en el sofá mientras se reproduce una película. — Mina se tumbó en el sofá a lado de Momo y Nayeon, descansando de su paseo.

— Yo elijo la película. — Jeong no se tardó en tomar el control.

— Iré con las chicas. — Momo se alejó de Nayeon y se acercó a la cocina.

Ahí estaban Sana, Jihyo y Dahyun acomodando todas las compras.

— ¿Puedo ayudar en algo?

— En realidad ya acabamos Momoring. — Sana río — Pero gracias. Vamos a ver la película.

Dahyun siguió a Sana, dejando solas otra vez a Jihyo y Momo.

— Jihyo...

— Vamos Momo, no nos perdamos la película.

— Sobre lo de antes...

Jihyo suspiró, algo nerviosa. Había agarrado coraje estando a solas con Momo, pero ahora era algo vergonzoso.

Aún así no se echaría para atrás, enseñaría a Momo a besar.

— No me he retractado, tengo mucho que enseñarte.

Momo sonrió, y abrazó a la menor. Pensaba que Jihyo de repente se negaría, pero la puso feliz de que aún estuviera dispuesta a ayudarla.

— Gracias.

...

Era aproximadamente la una de la mañana y Jihyo no podía dormir.

Se sentó en su cama y miró a las demás miembros, pero sus ojos recayeron en Nayeon, que dormía tranquilamente.

Se sentía mal, porque había aceptado enseñarle a besar a la novia de su mejor amiga.

Pero en el fondo Jihyo trataba de convencerse de que no era nada malo, de que era una simple ayuda inocente.

— ¿No puedes dormir? — Nayeon se levantó repentinamente, restregando sus ojos.

Jihyo negó — Me siento algo agobiada.

— ¿Por qué?

“Porque voy a besar a tu novia a tus espaldas y me siento culpable, pero no puedo negarme porque es Momo”.

— Ya sabes, el trabajo. — Rascó su nuca — Pero no es nada con lo que no pueda lidiar.

Nayeon bostezó — Sabes que estoy aquí para ti, no tienes que cargar con todo sola.

Culpable. Así se sentía Jihyo.

Tal vez debería decirle a Momo que al final no la ayudaría.

— Gracias Nay.

— Para que están las amigas. — Im se volvió a recostar — Ahora dormiré, deberías hacer lo mismo.

— Tienes razón, buenas noches.

— Buenas noches Jyo.

...

— Momo...

Era de mañana, las chicas se dirigían a ensayar. Jihyo quería encontrar un momento a solas con Momo para hablar con ella, y casualmente les tocó ir a en la misma camioneta que se dirigía a la empresa.

— ¿Si?

— Me siento culpable Momo, no quiero hacerle daño a Nayeon, no debería enseñarte a besar.

Momo solo miró a su líder fijamente. No tenía una expresión legible, lo que puso nerviosa a Jihyo.

— Bien.

— ¿E-eh?

— Si te sientes culpable no te voy a obligar.

Jihyo estaba confundida. Pensó que Momo le insistiría.

— Bueno.

— Te lo seguí pidiendo porque parecía que querías, ¿vas a fingir que si Dahyun no hubiera entrado a la casa no nos hubiéramos besado?

— Y-yo...

— Pero está bien, entiendo que no quieras hacerlo.

Jihyo se calló.

Ella quería hacerlo, quería besar a Momo.

Pero estaría traicionando a Nayeon, la chica que había estado con ella en las buenas y en las malas.

Era un dilema, entre sus más oscuros deseos, o su moral.

— Nayeon es mi mejor amiga...

— Dejemos el tema Jihyo, antes de que todo se vuelva incómodo, mejor simplemente me armare de valor y besaré a Nayeon, ya da igual si lo hago bien o mal.

No. No podía.

Jihyo se levantó del asiento de aquella gran camioneta y se acercó a Momo, tomó el rostro de la chica y estampó sus labios con los de ella.

Fue un beso lento, y Jihyo pudo notar la inexperiencia de Momo.

Pero lo estaba disfrutando.

— Tienes que mover los labios también.

Ya no había marcha atrás.