Aprender a besar [MoHyo]

Capítulo 7

Narradora

— ¡Noche de verdad o reto! — Jeongyeon gritó animada, tenía puesta una pijama de dinosaurios, y en su mano izquierda sujetaba una botella vacía.

Sana se animó al oír el juego, acercándose a la mayor.

— Siempre es emocionante jugar con ustedes.

Tzuyu rodó los ojos, odiaba verdad o reto, siempre la retaban a lo mismo, bailar gangnam style.

Las demás aceptaron sin problema.

Pero Jihyo se sentía nerviosa, pensaba y pensaba en qué clase de retos o verdades habría.

— No tengas miedo, no serán crueles contigo.

Momo río detrás de la pelinegra, había notado lo tensa que se había puesto Jihyo, y quiso tranquilizarla.

Park se giró y le sonrió levemente a Momo, aún con algo de nervios.

— Sabes que suelen ser salvajes, en especial Sana.

— Quieren divertirse, de todas formas, si no quieres jugar, podría quedarme contigo a ver alguna película.

— N-no es necesario. — Agitó sus manos — No les voy a arruinar la diversión, iré.

...

Las nueve chicas estaban sentadas en círculo, mirándose unas a otras, pensando en qué verdades o retos pondrían.

Jeongyeon entrecerró sus ojos y giró la botella.

Sana le preguntaba a Dahyun.

— ¡Dubu!, ¿verdad o reto?

— Verdad.

— ¿Has ingerido cosas indebidas? — Sana alzó y bajo sus cejas mientras veía a Kim de forma sugerente.

Dahyun se sonrojo, y golpeó levemente el hombro de Sana.

— Ah, Sana..., No, nunca.

La botella volvió a girar, Jihyo no le despegó sus ojos en ningún momento, sudando y temiendo que se detuviera con ella.

Ahora Nayeon le preguntaba a Tzuyu.

— Tzuyu, ¿verdad o reto?

— Verda-

— ¡Reto, muy bien!, ¡Baila gangnam style!

Así siguieron un rato, Jihyo suspiraba aliviada cada que la botella terminaba en otra miembro. Parecía que esa noche se salvaría.

Que ingenua.

— Oh, que vemos aquí. — Jeongyeon puso sus sonrisa más malvada, al ver que la chica Park era víctima de la botella — Jihyo, ¿verdad o reto?

Jeongyeon era cruel con las verdades, reto era la mejor opción.

— Reto.

— Girare la botella otra vez, y tendrás que besar a quien le toque la boquilla.

Y de nuevo, esa desgraciada botella giró.

Que no sea Momo, que no sea Momo, que no sea Momo.

Jihyo pidió mentalmente, sabiendo que su lado más vulnerable salía con la chica, pero como su suerte era mala, la botella había elegido a Momo.

En vez de mirar a la seleccionada, todos los ojos fueron a Nayeon, que parecía sorprendida.

— Realmente no sé si Momo quiera. — La mayor de todas empezó — No besa...