Jamás Te Olvidé/ Kookmin¹

Capitulo 16

Jungkook abrió sus ojos lentamente y se encontró con una hermosa cabellera rubia que posaba en su pecho mientras que unos pequeños brazos rodeaban su cintura. Sus brazos estaban rodeando el pequeño cuerpo de Jimin, se sintió el más afortunado del mundo entero, tenía mucho tiempo que no despertaba junto al amor de su vida.

Una sonrisa se dibujo en su rostro y depositó un tierno beso en el cabello de su novio.

Jimin comenzó a despertar lentamente y llevó una de sus manitas a sus ojos.

—Buenos días, mi amor — dijo Jungkook mientras acariciaba su espalda desnuda — ¿Como amaneció, mi pequeño?.

—Estoy muy bien, Jungkook — lo abrazó fuerte.

—Amor, tengo que trabajar, pero primero te prepararé un delicioso desayuno y luego te dejaré en tu casa — le explicó Jungkook. — Quería pasar el día contigo, pero mi padre me ha dicho que hay unas urgencias en la empresa.

—Pero... ¿Más tarde irás por mi? — preguntó, mientras formaba un pequeño puchero en sus labios.

—No lo sé, tendría que pensarlo — Habló, mientras colocaba una mano en su barbilla tratando de verse pensativo — ¿Qué puedo recibir a cambio? — Preguntó coqueto

—Mucho besitos — Jimin se levantó un poco y comenzó a darle besos por toda la cara haciendo reír al pelinegro — Puedo darte muchos más si quieres — Expuso feliz.

—Eso lo veré más tarde entonces — Jungkook lo abrazó nuevamente y le dio un apasionado beso en los labios — te prepararé algo mientras te duchas, puedes ponerte mi ropa.

—Está bien — Le dio un beso rápido y salió directo al baño.

Era un muy buen cocinero, siempre le cocinaba comidas diferentes a Jimin cuando comenzaron a salir, otra de las cosas por las cuales se enamoro el rubio.

Jungkook le preparo un rico desayuno a Jimin, panqueques con Jugo de naranja y fruta picada, tal y como le gustaba a su novio. Al verlo salir de su habitación con su ropa puesta soltó una pequeña carcajada. Se veía muy tierno con su ropa, le quedaba como tres tallas más grandes, su suéter le llegaba casi a las rodillas, su pantalón llegaba al piso y tapaba un poco sus pies. Una imagen que Jungkook guardaría par siempre en su memoria.

—¡Oye no te rías! — Exclamó Jimin muy serio.

—Te vez muy tierno, mi amor — Jungkook lo tomó del brazo y lo atrajo hacia el para abrazarlo — Vamos a desayunar.

—Jungkook, todo se ve muy delicioso — Dijo mientras veía la mesa — extrañaba tus ricos desayunos.

—Y ahora los tendrás siempre, mi vida — Lo tomó de la mano y lo llevó a la mesa.

—Gracias, Jungkook, enserio gracias — Jimin tomó su mano por encima de la mesa y la dio un ligero apretón.

—No tienes nada que agradecer, mi amor.

Notó una cosa en Jimin que estaba completamente diferente. Casi nunca lo llamaba por su nombre, siempre le decía "Kookie" o "Mi amor"  algo parecido, pero desde que volvieron Jimin sólo lo llamaba por su nombre. El mayor sabía que no todo sería igual después de todo lo que pasó, pero lucharía día y noche porque todo volviera a ser como antes o mejor.

Luego de desayunar Jimin y Jungkook lavaron los platos y organizaron la pequeña cocina.

Jungkook tomó una ducha rápida mientras el rubio lo esperaba acostado en el sofá de la sala. Salieron del departamento del mayor y fueron directo al de Jimin. Y como antes, colocaba sus canciones favoritas en el auto de Jungkook mientras cantaba y reía.